Principios metodológicos en la intervención educativa:

La tarea educativa en los centros de protección de menores se dirige a la formación de cada menor. Principios de actuación: programación e intencionalidad, adaptación al desarrollo evolutivo y madurativo de cada persona, clarificación de las responsabilidades de las personas adultas y de los ámbitos en los que los niños, adolescentes y jóvenes puedan tomar decisiones y asumir responsabilidades, acción educativa continua, oferta de actividades y metodología rica y diversa, la evaluación y retroalimentación deben ser consustanciales a toda la acción educativa.

Instrumentos y técnicas de intervención educativa:

La asamblea, empleo de juego según edad, programación de dinámica de grupo, técnicas de modelado y moldeado, técnicas de modificación de conducta, álbum de vida, contrato educativo es un instrumento en el que se recogen las expectativas del equipo educativo, de cada menor y de la familia, entrevistas formales/informales sobre experiencias, personas…

La evaluación:

Proceso de análisis sistemático, inspirado en unos principios y criterios previamente establecidos, es desarrollado por parte de equipos profesionales, sobre los programas, actividades o recursos que constituyen su intervención social/educativa. Aplicar dicho análisis en la mejora permanente de la acción y calidad de la atención a los sujetos beneficiarios de la misma, constituye uno de los pilares que garantizan la actuación protectora de los centros de protección de menores.

Objetivos:

Finalidad la permanente y progresiva adecuación de los objetivos, estrategias y actuaciones, los medios y recursos empleados, así como instrumentos técnicos que utilizan los Centros, objetivo es mejora de la práctica, la evaluación referida al propio Proyecto Educativo tiene estos objetivos: -Valorar la idoneidad del proyecto y su adecuación a la realidad a la que pretende dar respuesta, Comprobar la coherencia interna del proyecto, si existe una integración y relación lógica y coherente entre las partes que los integran, Estimar la pertinencia del proyecto, si el proyecto tiene capacidad para dar respuesta a las necesidades reales de los grupos y sujetos destinatarios del mismo.

Tipos de evaluación:

Evaluación inicial-diagnóstica: momento del ingreso en el centro. Se debe partir de una evaluación lo más completa posible para detectar un estudio previo que aconseje esta medida como la más pertinente y ventajosa. El educador/a Tutor recopila toda la información necesaria para un óptimo conocimiento del caso, a través del Coordinador de Caso, todos los informes escolares, médicos o sociales que pudieran faltar. La evaluación inicial finaliza con la elaboración del proyecto educativo individualizado ajustado a las características del niño/a o adolescente. Se detallarán los objetivos prioritarios a alcanzar, estrategias a desarrollar, recursos a movilizar y la forma de evaluar los resultados.

Evaluación continua o seguimiento: efectuará a lo largo del proceso, objeto de ir abordando las posibles dificultades y constatando los avances o progresos. El seguimiento del PEI por parte de los profesionales sobre la base de la convivencia y la utilización de los recursos de la comunidad. Especial atención en llegar a una adecuada relación individual con cada niño/a o adolescente.

Evaluación final o valoración:

Al finalizar el proceso, o al finalizar un tiempo estipulado y permitirá conocer el grado de consecución de los objetivos propuestos. Proceder a la valoración de los logros conseguidos. La evaluación será llevada a cabo por el Educador/a Tutor en colaboración con el resto de educadores/as.

Centros de día:

Servicio que atiende durante el día a personas menores de edad cuya integración social y escolar es deficiente. Presta apoyo/orientación a los padres/madres o familiares para que puedan llevar a cabo sus propias funciones parentales. Uno de los objetivos es potenciar el desarrollo del menor, mediante un trabajo personalizado dirigido a mejorar hábitos de convivencia, conocimientos y destrezas para lograr una participación en la vida social y cultural de su entorno satisfactoria.

El proyecto Marco de Centros de Día para menores en Asturias:

-Titularidad: los centros de día podrán tener titularidad pública/privada o concertada. Usuarios: pueden ser: menores de edad (6-17), menores derivados por el Instituto Asturiano de Atención Social a la Infancia Adolescencia y Familia, menores mayores de 14 años, derivados por el Servicio de Justicia Juvenil que tengan libertad vigilada, asistencia a centro de día y tareas socioeducativas, menores derivados por el Instituto Asturiano de Atención Social a la Infancia, Adolescencia y Familia y población infantil en general.

Funciones:

Permite el desarrollo de acciones preventivas y aplicación de medidas de apoyo a la familia a través de actividades programadas a los menores y a sus padres o guardadores.