Transición a la Democracia en España

1. La Transición Política

El 22 de noviembre de 1975, Juan Carlos I es proclamado rey, marcando el inicio de un periodo crucial para España.

La Inmediata Tensión Social

La agitación social era permanente. Sectores opuestos a la dictadura manifestaban una elevada conflictividad en ámbitos como la metalurgia, la construcción, correos, transporte, banca y el Metro. Las manifestaciones fueron en aumento. La extrema derecha inició una campaña para crear un clima de terror que justificara el mantenimiento de un régimen autoritario. En marzo de 1976, cuatro trabajadores murieron en Vitoria a manos de la policía durante una manifestación. En mayo, un militante carlista fue asesinado por la extrema derecha. Grupos violentos como los Guerrilleros de Cristo Rey, las Brigadas Vasco-Españolas y la Triple A se organizaron.

Diferentes Proyectos Políticos

  • Inmovilista: Representado por grupos como Fuerza Nueva y la Asociación de Excombatientes, apoyados por la cúpula militar y la administración franquista, así como por periódicos como *Arriba*, *El Imparcial* y *El Alcázar*, que alentaban una intervención militar.
  • Reformista: Impulsado desde el franquismo, representaba el deseo de un cambio muy moderado, promovido por el rey, Torcuato Fernández-Miranda, Adolfo Suárez y Manuel Fraga.
  • Rupturista: Proveniente de la oposición democrática, buscaba una Constitución, un gobierno democrático y un nuevo Estado. Estaba representado por la Junta Democrática y la Plataforma Democrática, que finalmente se unirían.

Reforma o Ruptura

Los reformistas controlaban el gobierno, los medios de comunicación (televisión) y la administración, aunque su credibilidad exterior era limitada por su origen franquista. El sector rupturista contaba con legitimidad, pero la contestación social interna a la dictadura no era suficientemente fuerte. Países como Estados Unidos apoyaban una transición con Juan Carlos I sin rupturas drásticas.

2. Los Comienzos de la Transición

El Primer Gobierno de Juan Carlos I

Carlos Arias Navarro fue el presidente, representando el inmovilismo. Sin embargo, también había figuras como Antonio Garrigues, José María Areilza y Adolfo Suárez, partidarios de dialogar con la oposición. Ante la imposibilidad de impulsar un programa de reformas, el rey forzó la dimisión de Arias Navarro y creó un nuevo gobierno presidido por Suárez.

Suárez y la Ruptura Pactada

Suárez implementó cambios inmediatos, como la Ley para la Reforma Política, aprobada por las Cortes en diciembre de 1976. La prensa de la transición emergió con diarios como El País y Diario 16. En secreto, Suárez dialogó con Felipe González (PSOE) y Santiago Carrillo (PCE). Los acontecimientos se sucedieron: la Ley de Amnistía en julio de 1976 (ampliada en marzo de 1977 y total en octubre), la disolución del Tribunal de Orden Público, la legalización del derecho a la huelga en marzo de 1977 y la libertad sindical en abril. En abril de 1977 se legalizó el PCE, una arriesgada apuesta ante el rechazo de los sectores franquistas del ejército. En marzo de 1977 se aprobó la Ley Electoral, y en junio se celebraron las primeras elecciones para elegir a los miembros de las Cortes constituyentes.

La Estrategia de la Tensión

Desde la extrema derecha, los sucesos se interpretaron como una traición, provocando acciones para instigar un golpe de Estado. En enero de 1977, el asesinato de abogados laboralistas en un despacho de CC.OO. generó un enorme impacto social. Varios jóvenes murieron en manifestaciones a manos de la ultraderecha y la policía. El terrorismo de ETA intensificó sus atentados a partir de 1977 para dificultar el proceso democrático. Los GRAPO también actuaron con secuestros de altos cargos militares y políticos.

3. Las Elecciones de 1977

Partidos de Centro y Derecha

Surgieron con líderes provenientes de la dictadura: UCD con Adolfo Suárez y AP con Manuel Fraga.

Partidos de Izquierdas

El socialismo estuvo representado por el PSOE y el Partido Socialista Popular, además de los socialistas catalanes que en 1978 se agruparon en el Partit dels Socialistes de Catalunya. El respaldo de la Internacional Socialista impulsó significativamente al PSOE. El comunismo, con Santiago Carrillo, contaba con un fuerte apoyo social en el mundo obrero y estudiantil. La izquierda radical agrupaba partidos que no fueron legalizados hasta después de 1977.

Partidos Nacionalistas ante las Elecciones

El PNV se consolidó como el principal partido nacionalista en el País Vasco. En Cataluña, Convergència i Unió emergió en 1978 como la fuerza nacionalista dominante. Partidos como Esquerra Republicana de Catalunya o la Unió del Poble Català aún no estaban legalizados.

Proceso Electoral

Las elecciones del 15 de junio de 1977 dieron la victoria a UCD con 166 diputados, seguida del PSOE con 118. El PCE obtuvo solo 19 escaños, lo que provocó una crisis interna. Alianza Popular consiguió 16 escaños, y los partidos nacionalistas también obtuvieron resultados notables.

5. La Etapa de UCD

Dificultades Iniciales

En junio de 1977, Suárez asumió la presidencia del gobierno, estableciendo tres vicepresidencias: de Defensa, de Asuntos Políticos y de Asuntos Económicos, para abordar los principales problemas del momento. La posibilidad de un golpe de Estado, alentado por la ultraderecha, era una amenaza real. La crisis económica, iniciada con la crisis mundial de 1973, afectó gravemente al país. En 1977, la inflación se disparó y el paro creció alarmantemente. En octubre se firmaron los Pactos de la Moncloa por los partidos parlamentarios, iniciando un plan de ajuste económico para corregir la inflación y la balanza de pagos. Era necesario desmantelar la dictadura y establecer nuevas leyes, culminando en la elaboración de la Constitución. El terrorismo, desde distintos frentes, se convirtió en un grave problema de Estado, además de alentar las tramas golpistas.

La Disensión en UCD

Tras la aprobación de la Constitución, las elecciones de 1979 revalidaron la mayoría de UCD, aunque el PSOE acortó distancias. AP y el PCE quedaron rezagados, mientras que los partidos nacionalistas vasco y catalán se consolidaron. En abril de 1979 se celebraron elecciones municipales, en las que el PSOE aumentó su fuerza y ganó en muchas capitales importantes. UCD experimentó diferencias internas debido a sus diversos sectores: reformistas, democristianos, liberales y socialdemócratas. El debate sobre la ley del divorcio y la moción de censura presentada por el PSOE, aunque fracasada, debilitó el liderazgo de Suárez. El terrorismo, las tramas golpistas y la crisis económica llevaron a su dimisión en enero de 1981. Fue sustituido por Leopoldo Calvo Sotelo, con quien se aprobó la ley del divorcio, España se incorporó a la OTAN y avanzaron las negociaciones para la adhesión a la Comunidad Económica Europea.

El 23-F

Durante la sesión de investidura de Calvo Sotelo, el golpe de Estado se materializó, dirigido por el coronel Antonio Tejero. La División Acorazada Brunete ocupó puntos estratégicos en Madrid, y el general Milans del Bosch proclamó el estado de guerra en Valencia. El mensaje del rey en televisión, defendiendo el orden constitucional, frenó el apoyo militar al golpe. Tras el juicio, doce mandos militares y varios guardias civiles fueron condenados. Un tribunal civil endureció las penas inicialmente fijadas por un tribunal militar.

6. La Etapa del PSOE

Elecciones de 1982

En octubre de 1982, el PSOE obtuvo mayoría absoluta, mientras que UCD se descompuso y desapareció al año siguiente. El programa socialista defendía el cambio. Sectores de AP se unieron a otros procedentes de UCD, formando Coalición Popular, que obtuvo 107 escaños, aunque no mantuvo su progreso en elecciones posteriores.

Labor del Gobierno Socialista

Durante los años de gobierno del PSOE, se produjo una importante recuperación económica, impulsada por una mejora económica general y los programas de Miguel Boyer y Carlos Solchaga. Se llevó a cabo una reconversión industrial que modernizó el sector, aunque con un coste en empleos. La incorporación a la CEE efectiva desde enero de 1986 contribuyó a esta recuperación. En política social, se sentaron las bases del Estado del Bienestar, y la proyección internacional de España aumentó. La participación en la firma del Tratado de Maastricht, que transformó la CEE en la Unión Europea, otorgó un gran protagonismo a Felipe González. Por otro lado, el cambio de postura del PSOE respecto a la OTAN generó descontento en parte de la izquierda. Se acometió también una reforma militar que modernizó el ejército, eliminando la herencia franquista y preparándolo para misiones internacionales.

El Terrorismo de ETA

ETA incrementó sus actos, causando más de 400 víctimas, mientras perdía apoyo social. Esto propició actuaciones conjuntas contra ella, como el movimiento “manos blancas”. El gobierno combatió el terrorismo en varios frentes: policial, con el apoyo francés, se detuvo a la cúpula directiva y se desarticuló la organización. Políticamente, se intentaron conversaciones en Argel en 1986 que fracasaron, y en 1988 se firmó el Pacto de Ajuria Enea, que unió a los partidos políticos vascos contra el terrorismo. También existió terrorismo de Estado a través de los GAL.

Los Acontecimientos de 1992 y la Decadencia del PSOE

Los Juegos Olímpicos de Barcelona y la Exposición Universal de Sevilla mostraron al mundo una España moderna y dinámica. Sin embargo, a partir de entonces, una serie de problemas desencadenaron una crisis en el PSOE. El desencuentro con los sindicatos, que se inició años antes con una huelga general el 14 de diciembre de 1988 de gran seguimiento, una crisis económica, escándalos de corrupción con cargos importantes como Luis Roldán y el hermano de Alfonso Guerra, financiación irregular del partido y los juicios del GAL, que llevaron a prisión al secretario de Estado de Seguridad, Rafael Vera, y al ministro del Interior, José Barrionuevo, marcaron el declive. En 1996, el PSOE perdió las elecciones, dando inicio a la etapa de Aznar.

7. La España de las Autonomías

Restablecimiento de los Gobiernos Catalán y Vasco

El protagonismo de los partidos nacionalistas apoyó el proceso autonómico, que se convirtió en un pilar fundamental de la Constitución.

El Proceso Autonómico

Desarrollado en el Título VIII de la Constitución, se establecieron diferencias en el acceso a las autonomías para las regiones históricas, que siguieron el artículo 151, y el resto de regiones, que lo hicieron por el artículo 143. El referéndum en Andalucía hizo que esta región también siguiera el artículo 151. Finalmente, el mapa autonómico quedó fijado en 17 comunidades autónomas y dos ciudades autónomas.

Organización de las Comunidades Autónomas

En cada territorio se convocaron elecciones autonómicas y se formaron los parlamentos autonómicos. Posteriormente, se negociaron las transferencias de competencias y las fuentes de financiación. En 1992, PSOE y PP firmaron un acuerdo para igualar las condiciones de las autonomías que accedieron por distintos artículos.

Los Ayuntamientos Democráticos

Las elecciones municipales de 1979 vieron a la izquierda alcanzar la mayoría en las principales ciudades. Se acometieron obras de renovación de infraestructuras, nuevos planes de ordenación urbana y dotaciones que transformaron la estructura urbana del país.