Teoría Cognitivo Social de Bandura: Fundamentos de Personalidad y Autoeficacia
Introducción a la Teoría del Aprendizaje Social
Se le da importancia al contexto social en la formación de la personalidad. Un trabajo clásico es el modelado de la agresión, donde es posible aprender la conducta agresiva a partir de la simple observación de modelos, sin ser reforzado por comportarse agresivamente.
Aprendizaje Social de Albert Bandura
Bandura creía que, además de los estímulos externos, el aprendizaje también se generaba a partir de determinantes internos y sociales.
Determinismo Recíproco
Se enfatiza la naturaleza recíproca de la interacción entre tres factores:
- Factores conductuales
- Factores cognoscitivos
- Factores ambientales
El yo en la teoría del aprendizaje social es un grupo de procesos y estructuras cognoscitivas por las cuales las personas se relacionan con su ambiente y lo ayudan a moldear su conducta.
El Modelamiento
El sujeto observa a otra persona ejecutar una conducta o secuencia de conductas.
Existen tres factores que influyen en el modelamiento:
- Características del modelo
- Atributos del observador
- Consecuencias recompensantes asociadas a una conducta (más fuerte)
Aprendizaje por Observación (Vicario)
La conducta se aprende a través de la observación (vicaria), ya sea intencional o accidental.
Este aprendizaje excede a la imitación: el observador aprende de los errores y los éxitos del modelo.
Explica las conductas innovadoras y creativas: Los observadores adquieren características similares de diferentes respuestas y crean reglas de conducta que les permiten ir más allá de lo que han visto u escuchado, que pueden ser muy diferentes de aquello que han observado en realidad.
Núcleo de la Personalidad
Las variables cognoscitivas se pueden emplear en lugar de los rasgos para describir la personalidad y predecir la conducta en situaciones diversas.
Teoría Cognoscitiva de la Personalidad (Cognitivo Social)
La personalidad es la interacción entre cognición, aprendizaje y ambiente.
Juegan un papel importante las expectativas internas de los individuos.
El ambiente influye en la manera de comportarse y, por tanto, modifica las expectativas del individuo ante otras situaciones respecto a su comportamiento.
Las personas se ajustan a unos criterios o estándares de desempeño que son únicos a la hora de calificar un comportamiento en diversas situaciones.
Bandura consideró a los humanos como seres complejos, únicos, activos, destacando el pensamiento y la autorregulación, pues los individuos están en una continua resolución de problemas, partiendo de la experiencia y de la capacidad de procesamiento de información.
Autorregulación
Las personas tienen un considerable control sobre su propia conducta.
La gente puede autorregular sus emociones tan bien como su conducta. Los acontecimientos de la vida contribuyen a la felicidad o tristeza, y otras emociones, pero también se puede sentir diferente por los procesos internos de la autorregulación.
La habilidad para evitar pensar en cosas desagradables puede ser adaptativa.
Periferia de la Personalidad
Autoeficacia
Creer “que uno puede organizar y ejecutar determinados cursos de acción requeridos para tratar con situaciones prospectivas” (Bandura, 1980).
Para Bandura (1987), “la eficacia comporta una capacidad generativa en la que es necesario integrar las subcompetencias cognitivas, sociales y conductuales en cursos de acción a fin de conseguir distintos propósitos”.
El sujeto construye sus percepciones sobre sí mismo a partir de la interacción de dos elementos:
- De sus propias experiencias previas
- De la interpretación que realiza de su propia ejecución
Para Bandura, existen tres tipos de expectativas:
- Las expectativas de la situación (la acción de la persona no influye en las consecuencias o hechos)
- Las expectativas de resultado (creencias que tiene el sujeto con relación al resultado de su propia conducta)
- Las expectativas de autoeficacia o autoeficacia percibida (creencia sobre sus capacidades para poder realizar las acciones necesarias que le permitan obtener los resultados deseados)
Evolución de la Autoeficacia
Comienzos de la Eficacia Causal Percibida
El pensamiento autorreferente se inicia desde los primeros meses de vida, cuando las experiencias del niño (en base a la acción propia y a la observación de los demás) se convierten en la base del sentido de eficacia causal, la cual se vincula o relaciona al control que desarrolla sobre los objetos que manipula y sobre la conducta de atención que le brindan los adultos del entorno.
Desarrollo de la Eficacia en los Primeros Años de Vida
El niño irá conociendo sus propias capacidades, las que le permitirán comprender y dominar sus experiencias de vida. Mientras dependen del adulto, aprenden ciertas conductas sociales y verbales para influir en ellos, desarrollando así sus competencias cognitivas y sociales.
Son importantes las vivencias en el entorno familiar, pues brindan experiencias de seguridad, y luego, con la adquisición del lenguaje, los adultos les brindan indicaciones valorativas sobre su conducta, preparándolos para cuando ellos no estén a su lado. Son importantes las experiencias con los hermanos, quienes favorecen el proceso de comparación social que luego se desarrollará con los amigos o compañeros de colegio.
Desarrollo de la Autoeficacia en la Adolescencia y Edad Adulta
El adolescente aprende a asumir la responsabilidad de sus actos, mediante el despliegue de sus habilidades y el conocimiento de las normas sociales impartidas por el adulto.
En la adultez, los nuevos roles (de pareja, de paternidad o laborales) plantean nuevos retos a los que la sensación de ser autoeficaces en dichos espacios se convertirá en el fundamento motivacional para enfrentarlos.
En la adultez media, se replantean los retos, pues la estabilidad de las autopercepciones cambia por los nuevos sucesos de la vida (ej. cambio de trabajo o cambios físicos). Se redefinen los objetivos de vida y se replantea la eficacia percibida sobre muchas de sus capacidades: algunas disminuyen (como las actividades físicas) y otras se incrementan (como el pensamiento crítico).
Reevaluaciones de Autoeficacia en Edades Avanzadas
Etapa difícil, pues se tiene la idea de la “disminución de las capacidades”; sin embargo, si bien las capacidades físicas disminuyen (y con ellas las funciones biológicas mediadoras), la persona cuenta con una reserva fisiológica suficiente para mantener su funcionamiento psicosocial. Esto depende del sentido de autoeficacia percibida que tenga la persona.
Las fuentes de información siguen siendo importantes: Si las autoevaluaciones parten de la comparación consigo mismo a lo largo de su vida, es menos probable que minimice su eficacia personal, pero si se compara con personas más jóvenes, es probable que incremente su ineficiencia.