El Surgimiento del Arte Cristiano

Con el surgimiento del cristianismo, comenzaron a desarrollarse nuevas expresiones artísticas, ligadas a los principios y valores de la doctrina de Cristo. En un principio, el cristianismo utilizó para el culto las edificaciones paganas realizadas con anterioridad. Más adelante, comenzaron a construir sus propias edificaciones, llamadas iglesias.

Representaron imágenes de la vida de Jesús y de los santos, y desarrollaron una extensa iconografía ligada a esta nueva religión, tanto en lo escultórico como en la pintura. Las imágenes iconográficas estaban integradas en los espacios arquitectónicos de las iglesias.

El Cristianismo Temprano y las Catacumbas

Para los romanos, el emperador era hijo de los dioses, y ellos veían en la nueva religión monoteísta una amenaza contra el poder del Imperio. Por este motivo, el cristianismo se desarrolló, en un principio, en las catacumbas de Roma. Estas eran grandes galerías subterráneas donde los primeros cristianos practicaban el culto a su dios y podían esconderse cuando los romanos los perseguían. Como necrópolis (cementerio de gran extensión en el que abundan los monumentos fúnebres), se diferenciaban de las de Egipto y Grecia por la distribución de los espacios, ya que en estas últimas existía un mayor orden y estaban más decoradas.

Con el cristianismo, comienzan a representarse imágenes de Jesús, santos y ángeles. La imagen de Cristo fue representada en un principio como la de un muchacho joven y con cabellos ondulados. Recién después del siglo V se comenzó a representar con solemnidad y con barba.

El Concepto de Artista y las Artes Liberales

El término artista parece haberse acuñado en la Edad Media, pero su significado viene de varios siglos antes. Podía ser usado para denominar a un artesano de cualquier tipo. Las llamadas artes liberales eran siete y fueron heredadas de la Antigüedad tardía. Esta clasificación aludía globalmente al conocimiento del ser humano y se subdividía en:

  • El Trivium: gramática, retórica y dialéctica.
  • El Quadrivium: aritmética, astronomía y música.

Todo lo referido a las artes visuales no correspondía dentro de estas disciplinas.

El Arte Bizantino: Esplendor de Oriente

El arte cristiano de Oriente (Bizancio) tuvo características muy distintas del arte cristiano de Occidente. En la Edad Media, las poblaciones estaban compuestas, en su mayoría, por campesinos, quienes se agrupaban alrededor de los castillos de los señores feudales y de las abadías. La religión era el organizador social y conducía la vida comunitaria. Fue por entonces que se hizo necesario construir iglesias y monasterios.

Al transformarse la antigua Bizancio en Constantinopla, surgió el arte bizantino, que resultó de la mezcla e influencia helenística (Grecia), romana y oriental. Esta combinación produjo un arte rico y suntuoso. La arquitectura bizantina se caracterizaba por el empleo de una decoración profusa en la que se utilizaba el mosaico, el color azul y el dorado. Implementó el uso de cúpulas.

Iconoclasia: El Debate sobre las Imágenes

En la Edad Media, tanto en Oriente como en Occidente, hubo grandes discusiones sobre si las imágenes (iconos) eran perjudiciales porque promovían la idolatría. Las luchas se dieron entre defensores de las imágenes (iconódulos) y los detractores de estas (iconoclastas). El cristianismo surge como una religión monoteísta que lucha contra el paganismo.

Ejemplos notables de arquitectura religiosa bizantina incluyen la Catedral de San Miguel Arcángel en Moscú (al fondo se puede apreciar la fachada de la Catedral de la Anunciación) y la Basílica de Santa Sofía.

Maestros-Artesanos y Gremios Medievales

Se llamaba maestros-artesanos a los artistas que trabajaban de forma anónima, en grupos que conformaban gremios. Los gremios agrupaban a personas que realizaban un mismo oficio. Una de las tareas que cumplía el gremio era supervisar la calidad de las tareas y los precios que cobraban los artesanos. Los grupos de artesanos estaban conducidos por un maestro.

El Arte Románico: Solidez y Espiritualidad

La arquitectura románica nace de la fusión de elementos de la arquitectura romana con otros aportados por la arquitectura oriental. Las primeras iglesias que comenzaron a construirse bajo el estilo románico se caracterizaron por tener una sólida presencia y poca altura, especialmente si las comparamos con el estilo gótico posterior; poseían pocas ventanas y puertas.

A pesar de que la mayor parte de la población vivía en campos dedicándose a la agricultura, los artesanos y los mercaderes comenzaron a concentrarse en ciudades que se crearon alrededor de abadías, cruces de caminos y castillos. Las ciudades fueron cada vez más importantes y con ellas creció también un poderoso grupo social: la burguesía.

En el periodo románico, los temas tratados por los artistas fueron de tipo religioso. Las imágenes enseñaban la religión, la vida de Jesús, santos y mandamientos eran representados en imágenes. Las iglesias románicas poseían gran cantidad de pinturas y esculturas, de altos y bajos relieves con imágenes que cumplían esa función educativa.

Ejemplos de Arte Románico:

  • Fachada del Duomo en Verona, Italia.
  • En Pisa, Italia: el Baptisterio, el Duomo y la Torre de Pisa.

El Arte Gótico: Elevación y Luz

Junto a estos cambios del orden social, también el arte y la arquitectura fueron modificando sus expresiones, así que el concepto románico de arte debió dar paso al surgimiento de un nuevo estilo: el Gótico, que nació en Francia alrededor del siglo XI y se extendió a toda Europa.

Los hombres de la época mostraban orgullosos sus gustos estéticos, sus nuevas ideas y también el esplendor de las ciudades. Las catedrales se comenzaron a construir en los centros de las ciudades.

Los edificios góticos se diferencian especialmente de los románicos por su esbeltez, altura y por la cantidad de aberturas que poseen. Se quería expresar que los seres humanos centraban su mirada en el firmamento, de donde provenía lo divino. Las construcciones en la Edad Media eran, en general, de gran tamaño. Eran esencialmente obras colectivas y anónimas.

En el Gótico, la función educativa de las imágenes fue reemplazada por vidrieras llamadas vitraux (o vitrales), donde también se representaban escenas religiosas. La catedral gótica más antigua es Notre-Dame de París.