Política Exterior de España durante la Transición Democrática (1975-1978)
Este periodo va desde el 20 de noviembre de 1975, fecha en la que muere Franco, hasta la entrada en vigor de la Constitución democrática española el 30 de diciembre de 1978.
Etapas de la Transición Española
Las etapas de este periodo de la historia española son:
El Franquismo sin Franco
Va desde la muerte de Franco hasta junio de 1976, cuando se plantea la Ley de Reforma Política. En ese periodo no se sabe absolutamente nada, ni los españoles ni fuera de España, lo que va a pasar con el país. Se produce una clara vinculación entre la política interna y la política externa. De esa política exterior sacamos dos características:
- El fracaso de liberalización exterior del primer gobierno de la monarquía, intentando normalizar las relaciones diplomáticas que España tenía pendientes, además de la homologación de España por parte de los países europeos.
- La estancación y el bloqueo de todos los tratados multilaterales que España tiene firmados y que entraron en vigor.
- El intento de renegociación de los acuerdos con Estados Unidos, lo que supondrá la internacionalización de nuestro ejército.
Hay un fracaso en relaciones externas salvo con Estados Unidos.
La Progresiva Participación de España en la Sociedad Internacional
Esta situación la tenemos que llevar desde que los españoles deciden que quieren ese cambio político y empiezan a notarse los resultados de esas elecciones, que se empiezan a aplicar en junio de 1977, comenzando así el periodo de redacción de la Constitución. Esta etapa va desde la planeación de la Ley de Reforma Política a la aplicación de esa ley en julio de 1977. Aquí empieza la auténtica Transición política, el auténtico cambio político. Se observa de forma general el desarrollo y eficacia del servicio exterior. Las grandes características de esta etapa en relaciones exteriores son:
- Plena normalización de las relaciones exteriores de España con los países socialistas. España establece relaciones diplomáticas con México, así como relaciones prácticamente universales, como con Albania e Israel.
- Apreciación de un aumento de la participación española en los tratados internacionales en materia de derechos humanos. Se retoma el pulso de los tratados internacionales. Los españoles van a firmar dos documentos internacionales que conforman la columna vertebral de uno de los rasgos que han consolidado las Sociedades Internacionales: los Pactos de Derechos Civiles y Políticos, y el Pacto de Derechos Económicos, Culturales y Sociales, reflejando la realidad bipolar del momento. España va a firmar la Convención de Derechos Humanos elaborada en Roma en 1950 por los Estados miembros del Consejo de Europa.
- La homologación de España en Europa el 22 de abril de 1977. Europa, desde el Parlamento y las Comunidades Europeas, da luz verde a España para que esta pueda legalmente realizar cualquier acción, pero estas estarían vigilando. España admite el pluripartidismo al legalizar el Partido Comunista en abril de 1977, una de las razones por las que se homologa al país en Europa, lo que ayuda a democratizarse y a internacionalizarse.
Objetivos de la Política Exterior durante la Transición Política
- Consolidar la Democracia. España estaba dispuesta en ese momento a no tomar ninguna decisión que no la pusiera en peligro en el marco de la Sociedad Internacional.
- Reforzar a España a nivel internacional en el bloque occidental. En la etapa franquista estuvimos en una política exterior pasiva, por lo que se consolida a España a nivel internacional como potencia media en Europa y en las Naciones Unidas.
- Puesta en valor del espacio estratégico español. Lo que se buscan son beneficios de esa posición internacional occidental de nuestra potencia media, además de rentabilizar la posición geoestratégica española.
Principios Rectores de esta Política Exterior como País Democrático
- Respeto de las normas de derecho internacional y principios de Naciones Unidas.
- Desarme y distensión para favorecer la paz y seguridad internacionales.
- Búsqueda de un orden internacional más justo y más equitativo.
Características Generales de esa Política Exterior
- Voluntad política de desempeñar un papel activo en la Sociedad Internacional. Se busca la participación activa en las relaciones internacionales como potencia media mundial que los define de otra manera en el ámbito europeo y actor regional de primer orden, producto de la firme voluntad de participar activamente en la Sociedad Internacional y llevarlo a cabo.
- Universalización total de nuestras relaciones internacionales.
- Prioridad europea. Denominada la Opción Europea. Esta implícita de una forma muy clara en la segunda solicitud formal de adhesión a las Comunidades Europeas, producida justo después de poner en marcha la Ley de Reforma Política.
Principales Ejes Políticos de las Relaciones Exteriores de España a partir de 1978
La geopolítica es una disciplina que históricamente nace en el siglo XIX de la mano de un geógrafo y viajero británico al servicio del Imperio Británico llamado Mackinder. Este estudio de las relaciones y estrategias de poder tiene un componente espacial, que es el Estado. Ejerce influencia directa sobre la cuestión de las fronteras.
Los aspectos que España va a introducir son:
- La cambiante distribución de los aspectos de poder. Ha hecho que España a finales del siglo XX deje de ser un actor regionalmente menor a ser un actor regional de primer orden.
- Estrategias territoriales de los actores que operan en el escenario internacional. Hacen uso de su territorio y de lo que ocurre en él por la
- Localización de las áreas de conflicto.
- Posición geoestratégica de España. Hay tres grandes áreas de influencia importantes para España, que son Europa, su prioridad política; el Mediterráneo; y el Atlántico. Los intereses que se derivan de todo ello son los que le aportan seguridad y los que contribuyen a la defensa del interés vital. Los elementos del interés vital de España son la mayor seguridad, mejor homologada cuanto más integrada esté Europa; el mantenimiento de la paz y seguridad en el Mediterráneo; especial interés en el norte de África; y estabilidad política y atención de la libertad de intercambios y comunicación entre los diferentes territorios españoles.
Valor Geoestratégico de España
Tenemos que tener en cuenta la doble posición geoestratégica atlántica y mediterránea. Desde el punto de vista atlántico, junto con las Islas Británicas, es la única zona europea con un punto de defensa de la OTAN; y desde el punto de vista mediterráneo, por la posición española y a pesar de la existencia de la colonia británica de Gibraltar, ejerce un cierto control sobre el Estrecho, situándose en la intersección de dos ejes estratégicos excepcionales para las relaciones internacionales de las grandes potencias: el que va de este a oeste, que pone de manifiesto el antagonismo del bloque, como paso de Atlántico a Mediterráneo; y el que va de norte a sur, pues España es un puente natural de Europa a África. Desde un punto de vista económico, es una importantísima zona estratégica gracias al Mediterráneo por el control del Estrecho.
Escenarios de la Política Exterior de España
- Iberoamérica: Es especial por nuestra relación histórica. El objetivo de los españoles en 1978 es combinar los intereses españoles, sobre todo a través de la actuación de las empresas españolas, al mismo tiempo que se intenta apoyar el desarrollo de las mismas y regulando las inmigraciones y la situación de los inmigrantes procedentes de aquella zona en España. Esto se mezcla con la voluntad política de contribuir a la solución de los principales problemas en la zona como la inestabilidad del modelo económico actual, la debilidad de las instituciones políticas, etc.
- Mediterráneo: El Mediterráneo para España es el principal escenario geoestratégico, debido a la competencia creciente por algunos recursos naturales estratégicos para las economías como los hidrocarburos del norte de África, concretamente el gas natural de Argelia. El objetivo de España en esta zona es asegurar la estabilidad y el control de este suministro a medio y largo plazo. Como España es el punto geográfico más cercano de África, se sitúa en el centro de la línea divisoria política, económica, social y cultural entre los países europeos occidentales y los países del sur. Esto ha servido para reforzar la función de España como frontera exterior de la Unión Europea. En este sentido, el eje Baleares-Estrecho-Canarias acentúa esa importancia española porque el Estrecho continúa siendo a día de hoy la principal vía marítima del mundo y por la presencia de navíos con armamento nuclear. Este eje nos sitúa en un elemento focal en las relaciones internacionales españolas: sus relaciones con Marruecos. Marruecos siempre ha sido un interlocutor fundamental para España en el Magreb, lo que quiere decir que la entrada de España en las Comunidades Europeas complica las relaciones de España con Marruecos porque ambos países compiten por la misma costa, consiguiendo un tratado de asociación especial donde los productos marroquíes están mejor situados en Europa que los españoles.
- Oriente Próximo: Las Comunidades Europeas le han servido a España para equilibrar una política española en la región. Desde la adhesión de España en las Comunidades Europeas va a comprender el interés estratégico de estas en la zona. Las relaciones de España con Oriente Próximo han sido habitualmente buenas o directamente muy buenas.
- África Subsahariana: El punto de partida son los retos que plantean esta zona para la política exterior española, como la pobreza o el hambre, además del SIDA. España va a participar en la exportación de los sistemas democráticos europeos a la zona, que todos los países participen en las dinámicas de integración regional.
- Reforzamiento de las relaciones de España con Estados Unidos y la presencia española en Asia: En 1982, España se convierte en miembro de pleno derecho de la OTAN gracias al visto bueno de Estados Unidos. Lo que hace España en relaciones internacionales con Asia es introducir la acción cultural.
- Mayor participación de España en Naciones Unidas y en el resto de las organizaciones internacionales: España participa en Naciones Unidas redefiniendo el enemigo que España va a tener a partir de la democracia, que lleva a otro de los grandes retos, internacionalizar el ejército, que consigue en ambas partes. Se convierte en miembro no permanente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. El 1 de enero de 1986 entra en vigor el Tratado de Adhesión de España a las Comunidades Europeas, y seis meses después, España comienza a formar parte de la Unión Europea.