Contexto Histórico: Azaña y el Ejército en 1931

La imagen muestra una fotografía histórica realizada el 7 de octubre de 1931 durante un discurso del presidente del Gobierno y ministro de Guerra, Manuel Azaña, en la Academia Militar de Toledo. Entre los asistentes, oficiales del ejército español, aparece a la izquierda el general Queipo de Llano, uno de los generales que se alzarían contra el gobierno republicano el 18 de julio de 1936.

Cuando el rey se exilió de España en 1931 tras la proclamación de la Segunda República Española, el estamento militar apenas rechistó. Sin embargo, el germen del africanismo (la ideología imperial-colonialista del sector hegemónico del Ejército) y la histórica intervención militar en la política española del siglo anterior permitieron a algunos de sus principales exponentes —los Sanjurjo, Mola, Franco, Varela, Saliquet, Yagüe…— aprovechar el vacío dejado por el monarca para instalarse en la dirección, primero soterrada y luego explícita, del poder.

Contra todas estas constantes adversas se enfrentaría Manuel Azaña, atento siempre a la importancia estatal del Ejército y a sus singularidades históricas, con las consecuencias políticas señaladas. Por ello, en la fotografía se aprecia cómo algunos oficiales le prestan atención, pero la segunda figura a la derecha le está haciendo caso omiso al político y parece estar concentrada en el fotógrafo y en la cámara que les dispara.

Medidas Principales de la Reforma Militar

  1. Ley de Retiro Voluntario de Oficiales (1931): Permitió el retiro con sueldo completo a los oficiales que quisieran abandonar el servicio. Se redujo en un 40% el número de oficiales, muchos de ellos considerados no afines a la República. Todos aquellos que decidieron permanecer en activo prestaron un juramento de lealtad al nuevo régimen.
  2. Disolución de la Academia General Militar (Zaragoza, dirigida por Francisco Franco): Considerada un bastión de oposición monárquica y conservadora. Azaña reorganizó la formación militar, creando academias separadas para las distintas ramas del Ejército (Infantería, Caballería, Artillería, etc.).
  3. Supresión de cuerpos y escalafones militares redundantes: Reducción del número de regimientos y simplificación de los escalafones, eliminando duplicidades. Reorganización de la estructura territorial del Ejército para asegurar un mayor control por parte del gobierno.
  4. Abolición del fuero militar para delitos comunes: Los militares, salvo en casos estrictamente relacionados con el servicio, serían juzgados por tribunales civiles.
  5. Reducción del presupuesto militar: Se disminuyeron los gastos en armamento y manutención del Ejército, destinando los recursos a otras áreas del Estado, como la educación o las obras públicas. En contrapartida, se creó el Consorcio de Industrias Militares, que pretendía agrupar y coordinar la producción de las fábricas existentes en España.
  6. Reestructuración de la Guardia Civil y creación de la Guardia de Asalto: La Guardia de Asalto fue creada como un cuerpo civil de seguridad pública, especialmente preparado para el control urbano y la defensa de la República. Se redujo el papel de la Guardia Civil, históricamente vinculada a los gobiernos conservadores y con antecedentes de intervención violenta en conflictos sociales.
  7. Revisión de los ascensos y promociones: Se establecieron criterios de mérito y capacidad, eliminando las promociones automáticas y los ascensos por antigüedad o por razones políticas.

Consecuencias de la Reforma Militar

A corto plazo (1931-1933)

  • Reducción del número de oficiales, lo que permitió una estructura más ligera y manejable.
  • Profesionalización parcial del Ejército, con nuevas normas para la promoción y la formación militar.
  • Oposición interna en el Ejército, especialmente entre sectores conservadores, que veían las reformas como un ataque directo a sus privilegios.
  • Incremento de conspiraciones y críticas, tanto dentro del Ejército como entre los sectores monárquicos y de la derecha política. Muestra de ello es el intento de Golpe de Estado de un pequeño grupo de militares con el general Sanjurjo a la cabeza en agosto de 1932 (la Sanjurjada).
  • Fracaso del Consorcio de Industrias Militares debido a los problemas presupuestarios del momento.

A medio plazo (1933-1936)

  • Desmovilización parcial del cuerpo militar, que nunca aceptó completamente las reformas de Azaña.
  • Reacción conservadora durante el Bienio Radical-Cedista (1933-1935): Se paralizaron muchas reformas y se intentó recuperar parte del control político del Ejército.
  • Preparación del Golpe de Estado de 1936, liderado por militares descontentos con las reformas y con la evolución del régimen republicano. Esto desembocaría en el estallido de la Guerra Civil Española.

Conclusión: El Legado de la Reforma

La reforma militar fue uno de los mayores retos del Bienio Reformista. Aunque Azaña consiguió modernizar parcialmente el Ejército y reducir su influencia política, no logró ganarse la lealtad de muchos sectores militares. Algunos, sobre todo los africanistas, lo vieron como una agresión a la tradición militar. La oposición interna y el creciente descontento acabarían convirtiendo al Ejército en uno de los mayores enemigos de la República, contribuyendo directamente a su caída tras el levantamiento militar de 1936.