La Guerra de Marruecos fue un auténtico cáncer de la vida política española entre 1906 y 1927.Su origen está en la Conferencia de Algeciras (1906), en que las disputas entre las grandes potencias por el Protectorado de Marruecos provocaron la concesión de la parte septentrional de éste, el Rif, a España.El Rif era una zona pobre poblada por tribus belicosas llamadas kabilas que constantemente amenazaban los puertos de Ceuta y Melilla.El gobierno de Maura y el ejército español se plantearon la conquista de El Rif como una cuestión de honor y prestigio nacional que permitiera olvidar a la opinión pública el desastre del 98. Además existían ciertos intereses económicos en la zona (minas de hierro).Sin embargo, la cuestión de Marruecos se convirtió en un terrible problema pues lejos de una victoria fácil se convirtió en una larga pesadilla por la resistencia de los rifeños dirigidos por un líder muy hábil: Abd-el-Krim.La Guerra de Marruecos dividió a la sociedad española. Por un lado, los políticos se dividieron entre aquéllos que apoyaban la conquista de Marruecos y los que preferían su abandono. Los militares se dividieron entre los africanistas (favorecidos por los ascensos conseguidos por méritos de guerra en Marruecos) y los juntistas (marginados en la Península y sometidos al ascenso por rigurosos escalafón, éstos acusan de enchufismo a los africanistas). Por último, la Guerra de Marruecos agravaba el problema de los soldados de cuota que libraba del servicio militar a los hijos de las clases acomodadas (esto provocó la Semana Trágica de Barcelona).El punto álgido del conflicto marroquí llegó en 1921 cuando el General Fernández Silvestre fue derrotado en Annual. Se perdieron más de 13.000 hombres y la propia ciudad de Melilla estuvo a punto de caer en manos de Abd-el-Krim. La oposición acusó al gobierno e incluso al propio rey de ineptitud. El desastre de Annual fue una de las causas más importantes del golpe de estado del General Primo de Rivera (1923)

La Dictadura de Primo de Rivera surgió como la última oportunidad que tenía la monarquía de Alfonso XIII de perpetuarse mediante la solución de los problemas que aquejaban a España. Entre sus causas está la inoperancia de los Partidos del Turno, el estado de agitación social influido por la Revolución Rusa de 1917 (Trienio Bolchevique en Andalucía; terrorismo anarquista, patronal y estatal en Barcelona), el Desastre de Annual y el ejemplo del triunfo del Fascismo en Italia (1922).El Golpe de Estado de Primo de Rivera contó con el apoyo del empresariado catalán interesado en acabar con el peligro anarquista, de un sector del ejército partidario de la mano dura contra el desorden social y, sobre todo, del rey Alfonso XIII como único medio de perpetuar la monarquía.El Directorio Militar (1923-1925) fue el primer período de la Dictadura. Se trataba de un gobierno formado por militares (no tiene nada que ver con el Fascismo Italiano, pese a las similitudes en la toma del poder) que suspendió aunque no derogó la Constitución de 1876  pues pretendía ser una solución temporal a la crisis. Este primer período estuvo coronado por varios éxitos como el Desembarco de Alhucemas (1925) que llevó a la derrota de Abd-el-Krim gracias a la colaboración con los franceses (1927). Otro éxito fue la represión del anarquismo en Barcelona.El Directorio Civil (1925-1930), supuso un intento de perpetuar la dictadura en el tiempo, para ello, Primo de Ribera quiso crear un partido, la Unión Patriótica formado por “notables locales” y no por auténticos políticos y quiso reformar la constitución, sin embargo, no tuvo suficientes apoyos y se retiró de la política (1930).La retirada de Primo de Ribera llevó a la oposición política ilegalizada durante la Dictadura, al Pacto de San Sebastián (1930) (republicanos, catalanistas y socialistas). En éste la oposición se une para derribar a la Monarquía, en principio mediante  un pronunciamiento. Sin embargo, el fin de la Monarquía de Alfonso XIII proviene de la voluntad popular, por los buenos resultados de la coalición republicana en las elecciones municipales de abril de 1931 que fueron entendidas como un plebiscito entre Monarquía y República. Alfonso XIII abdicó y abandonó España. Así se proclamó la II República Español

Evolución económica. La sociedaD. En las tres primeras décadas del siglo XX se produjeron transformaciones muy importantes en la demografía que indicaban la tendencia de la sociedad española hacia una incipiente modernización y mayor peso del mundo urbano.

La Gripe Española de 1918-19 fue la última mortalidad catastrófica que afectó a España (más de 200.000 fallecidos en un solo año) y a partir de los años 20 se fue produciendo una incipiente transición demográfica: caída de la mortalidad y especialmente de la mortalidad infantil. Esto no se tradujo, sin embargo, en un crecimiento demográfico espectacular, pues la natalidad también cayó muy pronto. Sí aumentó la esperanza de vida por la desaparición de las grandes hambres y epidemias. Otro fenómeno de este período fue la mayor intensidad de los movimientos migratorios, tanto hacia América como, sobre todo, los movimientos migratorios internos hacia las grandes ciudades (Madrid, Barcelona, Bilbao, etc.)