Karl Marx (1818-1883)

Nació en Alemania y murió en Londres. Estudió derecho en Bonn. Tiene una faceta como periodista (Gaceta Renana). En el exilio se va a París, donde conoce a F. Engels, y continúa la actividad política, ligada al internacionalismo obrero (Primera Internacional). Acaba en Londres (donde escribió El capital). En Bruselas fundó el Comité Comunista de Enlace y la Sociedad Obrera Alemana. Entre sus obras destacan: Manifiesto Comunista, Crítica de la Economía Política y La miseria de la filosofía.

Fuentes de Pensamiento

  • Hegel: Influencia de la dialéctica como estructura de la realidad. Traslada la dialéctica a la lucha de clases, constituyendo así el materialismo dialéctico. Esta se compone de: tesis (estado de las cosas), antítesis (negación de la tesis) y síntesis (resultado de un proceso y la conservación de lo anterior en lo nuevo).
  • Feuerbach: Influencia en la idea de Dios como proyección de los atributos del hombre ad infinitum. Además, Marx critica la mera especulación. La vida debe ser praxis.
  • Socialismo utópico francés: Proudhon y Fourier defienden la socialización de los medios de producción.
  • Economía política inglesa (Adam Smith, David Ricardo): Más crítica, la supuesta libertad del obrero que vende su fuerza de trabajo; crítica la teoría del valor-trabajo, e introduce la plusvalía.

Concepción de la Naturaleza Humana

El tema central de Marx es su concepción de la naturaleza humana, resumida en 5 tesis:

  1. El hombre es un ser natural, concreto y ligado a sus condiciones y necesidades.
  2. El hombre es esencialmente activo, su esencia es el trabajo y transformar la naturaleza y su ser. Con lo cual, la producción es la actividad práctico-productiva (praxis). Mediante ésta el hombre realiza y desarrolla su ser en la historia.
  3. Marx reduce el ser individual del hombre a la sociedad.
  4. La naturaleza del hombre consiste en la producción de su vida.
  5. Las relaciones sociales son inseparables de la naturaleza humana, pero dependen del contexto práctico-productivo. La esencia del hombre es producto histórico, ya que cambia en función de las condiciones materiales y sociales de la humanidad.

El Marxismo como Humanismo

El marxismo puede entenderse como un humanismo en un triple sentido:

  • Promueve una crítica y una lucha contra la alienación del ser humano, defendiendo el proyecto ilustrado de la racionalidad y la libertad.
  • Niega la existencia de un ser distinto y superior a la naturaleza y al ser humano.
  • El hombre es el principio de la sociedad, el sujeto de la historia y, en consecuencia, la base explicativa de su concepción teórica del mundo y de la historia.

La Alienación

La alienación es la enajenación, desposesión o desrealización de una parte del obrero, entregado al polo objetivo u opuesto al que va el trabajo. Hay 4 tipos de alienación:

  1. Alienación económica: Respecto al producto de su trabajo, el obrero objetiva su esencia en un producto que no le pertenece. De sí mismo, su propia actividad no le pertenece. Siente la naturaleza ajena a sí mismo.
  2. Alienación social: Se desposee de los vínculos sociales con otros y queda asignado estructuralmente a una clase social determinada: capitalista-proletariado.
  3. Alienación política: El Estado crea una ficción de unidad y cohesión social, pero en la práctica refuerza la desigualdad.
  4. Alienación religiosa: La religión defiende una forma de resignación, una justificación trascendente de la desigualdad, y una compensación futura de la opresión. Es el opio del pueblo y desactiva su capacidad de protesta.
  5. Alienación filosófica: La filosofía es un discurso abstracto y contemplativo, que no se hace cargo de las necesidades del trabajador. Es una fuerza ideológica dominante.

Friedrich Nietzsche (1844-1900)

Nació en Röcken (Alemania). Su padre fue pastor protestante. Nietzsche ocupó la cátedra de Filología Clásica, especializándose en la Grecia politeísta. Tuvo una vida dura, padeció enfermedades (como sífilis), penurias y terminó muriendo solo. Refleja su dolor en su escritura aforística. Sus obras están divididas en tres periodos:

  • Periodo romántico: Escribió El nacimiento de la tragedia y entró en contacto con Richard Wagner.
  • Periodo positivista: Adquiere un enfoque cientificista.
  • Periodo crítico: Escribió Así habló Zaratustra, El Anticristo y La genealogía de la moral.

Crítica a la Religión

Según Nietzsche, toda religión nace del miedo y de las necesidades de la impotencia que siente el hombre en sí mismo. El cristianismo, concretamente, ha invertido los valores de los antiguos griegos y romanos, que eran valores vitales, inventando un mundo ideal y celestial, que lleva consigo una desvalorización del mundo terrenal. Tiene las siguientes características:

  • Supone extravío de los instintos.
  • Solo fomenta los valores mezquinos (que son sentimiento propio de la moral de rebaño).
  • Habla del pecado, que es un atentado contra la vida.

Nietzsche interpreta el cristianismo como una moral vulgar. Tal vulgaridad viene de Dios, que ha sido el gran obstáculo de la vida; por eso hay que acabar con Él.

La Muerte de Dios

En La gaya ciencia, Nietzsche afirma “Dios ha muerto“, el lado trascendental que es el fruto y raíz del nihilismo. Pero lo que ha muerto es el dios de los metafísicos, el dios monoteísta. El que ha muerto es el dios moral de las contraposiciones metafísicas entre bien y mal, mundo real y mundo aparente.

La “muerte de Dios” también significa la crítica radical a la moral y a la metafísica (al dogmatismo). Se trata de la muerte de los valores religioso-culturales ligados al cristianismo y al platonismo. Además, Nietzsche habla también de la muerte de los ideales, de los valores en general, de lo suprasensible.

Durante mucho tiempo hemos valorado mirando hacia arriba, hacia Dios. Ahora hay que mirar hacia el propio ser humano, ya que es la idea de Dios lo que impide al hombre ser hombre, llegar a ser el Superhombre. Para que viva el hombre, ha de morir Dios. Si Dios vive, no puede vivir el hombre. Dios ha sido el pilar que ha sostenido toda la cultura de Occidente y, por fin, el hombre es capaz de destruirla. Para ello, también tenemos que cambiar los valores y la forma de valorar.

Con la muerte de Dios el hombre se libera a sí mismo (quitando del medio lo que no le había dejado ser hombre). Con ello se acaba la historia antigua y comienza la nueva, en la que el hombre se puede convertir en creador de su propio destino y llega a ser hombre por fin. Y Zaratustra es el gran pregonero de la muerte de Dios, que ha sido suplantado por el Superhombre, quien, por su nueva forma de valorar, superará el nihilismo.

Immanuel Kant (1724-1804)

Sus numerosos escritos se dividen en precríticos y críticos. Consiguió la cátedra de lógica y metafísica en la Universidad de Königsberg. Dentro de su periodo crítico, destacan: Crítica de la razón pura, Crítica de la razón práctica y Crítica del juicio. Kant representa la síntesis y superación del Racionalismo y Empirismo. También representa la Ilustración alemana (ver Qué es la Ilustración).

La Metafísica como Ciencia

En la introducción de la Crítica de la razón pura, Kant se muestra interesado por el problema de la metafísica como ciencia. Se plantea la cuestión de si es posible un conocimiento científico riguroso de Dios, de la inmortalidad del alma y de la libertad. Para solucionar este problema se plantea tres preguntas:

  1. ¿Cómo es posible la matemática pura?
  2. ¿Cómo es posible la ciencia natural pura?
  3. ¿Es posible la metafísica?

Condiciones del Conocimiento

Kant ha distinguido dos tipos de condiciones en el conocimiento:

  • Empíricas: Son particulares y fácticas y, por tanto, alterables.
  • A priori: Son universales, previas y necesarias a la experiencia. Pertenecen a la estructura del sujeto y condicionan los datos sensibles, por lo que Kant los llama trascendentales.

Fines de la Razón

El sentido del proyecto kantiano es la realización de la libertad y la salida de la “minoría de edad”. El objetivo es estructurar un orden social nuevo. La razón establece sus propios fines que determinan el sentido de la filosofía:

  • El primer fin: El conocimiento científico de la naturaleza y responde a la pregunta ¿Qué puedo conocer? (Crítica de la razón pura).
  • El segundo fin: Estudiar las leyes del comportamiento moral ¿Cómo debo actuar? (Crítica de la razón práctica).
  • El tercero: Delinear el destino último del hombre ¿Qué me cabe esperar? (Crítica del juicio).

Las disciplinas son conexas y se engloban en la pregunta ¿Qué es el hombre? Por tanto, la filosofía es la ciencia de la relación de todos los conocimientos con los fines esenciales de la razón humana.

Tipos de Juicios

Kant distingue dos tipos de juicios:

  • Analíticos: En los que el predicado está contenido en el sujeto, aunque sea implícitamente, y, por tanto, basta analizar el sujeto para saber que el predicado le conviene necesariamente. Estos juicios son explicativos, pero no amplían nuestro conocimiento del sujeto.
  • Sintéticos: En los que el predicado no está contenido en la noción del sujeto. Son ampliativos, ya que el predicado no está contenido en el sujeto y sí amplían nuestro conocimiento de este.

Por otro lado, atendiendo al modo en que es posible conocer la verdad de un juicio, los juicios pueden ser:

  • A priori: Aquellos cuya verdad puede ser conocida independientemente de la experiencia. Son universales y necesarios.
  • A posteriori: Aquellos cuya verdad solo puede ser conocida a partir de los datos de la experiencia. No son estrictamente universales ni necesarios.

Apartados de la Crítica de la Razón Pura

Dentro de la Crítica de la razón pura, Kant establece tres apartados:

  • Estética trascendental: Se corresponde con la facultad de la sensibilidad. El sujeto aporta formas a priori de la sensibilidad. Estas estructuras son formas vacías de contenido empírico. En la aritmética, el tiempo organiza la sucesión de números; en geometría, el espacio ordena las figuras. Los juicios sintéticos a priori son posibles en matemáticas.
  • Analítica trascendental: Corresponde con la facultad del entendimiento. La pregunta es: ¿Son posibles los juicios a priori en física? El entendimiento produce conceptos puros a priori denominados categorías. Las categorías ordenan fenómenos para producir juicios sintéticos a priori en física (leyes).
  • Dialéctica trascendental: Corresponde con la facultad de la razón. Se corresponde con los intereses más generales de la razón (Dios, alma y mundo). La pregunta es: ¿Es posible la metafísica como ciencia? Las categorías, en este caso, no se pueden aplicar a nada empírico porque Dios, alma y mundo son noúmenos.

Teología Racional

Las pruebas de demostración de Dios habituales incurren en ilusiones trascendentales (paralogismos). Kant reduce a 3 las pruebas de demostración de la metafísica:

  1. Prueba ontológica (San Anselmo, Descartes).
  2. Prueba cosmológica.
  3. Prueba fisicoteológica.

Aunque no son objetivamente demostrables, los noúmenos son los conceptos-guía de la razón, irrenunciables según sus intereses más profundos.

Hannah Arendt (1906-1975)

Filósofa alemana de raigambre judía. También periodista y politóloga. El ascenso del nazismo impide su progreso académico. Se exilia en París y Nueva York. Se encuadra dentro de la corriente fenomenológica (Husserl) y existencialista (Heidegger), e influye en la comprensión de los movimientos totalitarios del siglo XX, así como en la autorreflexión de las democracias liberales. Recupera el sentido comunitario de la política de Aristóteles.

Obras Destacadas

  • La condición humana
  • Los orígenes del totalitarismo
  • Eichmann en Jerusalén: La banalidad del mal

Pensamiento Político

Hannah Arendt parte en su reflexión política de dos planteamientos. Por un lado, la ontología de Martin Heidegger, quien apoyó al nazismo, donde se entiende la política como “administración”. Por otro, las ideas marxistas de la Escuela de Frankfurt, que pese a su crítica al estalinismo, se acercan al comunismo no democrático.

En La condición humana, Arendt define la “acción” como base de la vida activa. Esta acción es interacción política basada en pluralismo y libertad, frente a la violencia y el despotismo. Regímenes como el nazi o el estalinista eliminan al otro, su novedad y diferencia, y siguen una lógica de exclusión del “otro”. Ve en la filosofía clásica un desprecio por la vida activa frente a la vida contemplativa, presente en Platón, Marx o Heidegger, lo que deriva en actitudes antipolíticas y totalitarias.

En Los orígenes del totalitarismo, analiza el antisemitismo, el imperialismo colonialista y el racismo como base de regímenes que suprimen libertades individuales, como el nazismo y el estalinismo, produciendo deshumanización y reduciendo a las personas a “apátridas”. Estos sistemas promueven aislamiento e impotencia, y se basan en un “mal radical”, un daño irreparable.

En La condición humana, critica la visión del Dasein como “Ser-para-la-muerte” de Heidegger en Ser y tiempo. Frente a eso, propone la “natalidad”, la aparición de lo nuevo, que debe tener espacio de escucha, representado por la democracia.

En Eichmann en Jerusalén: La banalidad del mal, estudia a Adolf Eichmann, y ve en él no un monstruo, sino una persona común, cuya irreflexividad revela el fondo del mal moderno. Niega que el colaboracionismo nazi se base en sadismo o ideología fuerte, y apunta a la ausencia de diálogo compartido.

En Sobre la revolución, valora el momento fundacional de la revolución frente a su institucionalización. Compara la francesa y la americana: la segunda genera una Constitución sólida, la primera deriva en terror y violencia. Atribuye esto a que la Revolución francesa parte de la miseria, generando despotismo, mientras la buena política nace de la búsqueda de libertad, no de igualdad.

Finalmente, Arendt defiende una democracia directa basada en consejos ciudadanos y una revolución permanente, entendida como pasión política, ilusión, diálogo y construcción en común.

Literatura Hispanoamericana Contemporánea

Poesía

La poesía hispanoamericana del siglo XX se articula en torno a tres grandes ejes presentes en César Vallejo: el modernismo, con Los heraldos negros; la vanguardia, con Trilce; y el compromiso político, en España, aparta de mí este cáliz.

Pablo Neruda inicia con Veinte poemas de amor y una canción desesperada, que emplea recursos modernistas. En Residencia en la tierra, profundiza en el surrealismo, y Canto general representa una epopeya histórica de Hispanoamérica inspirada en cantos épicos.

Gabriela Mistral expresa, en Lagar, angustia ante la muerte y la guerra. Alfonsina Storni parte del modernismo, pero desarrolla una voz feminista y personal. Alejandra Pizarnik explora la culpa y el sufrimiento, mientras que Ida Vitale destaca en la poesía esencialista.

Novela Regionalista

La novela regionalista se asocia al costumbrismo, con sensibilidad lírica y crítica social. Los de abajo, de Mariano Azuela, aborda la Revolución mexicana. En La vorágine, José Eustaquio Rivera enfrenta a los personajes con la selva. Rómulo Gallegos, en Doña Bárbara, presenta la lucha entre naturaleza salvaje y racionalidad. En Don Segundo Sombra, Ricardo Güiraldes retrata un mundo rural en extinción. Ciro Alegría, en El mundo es ancho y ajeno, denuncia la opresión de los campesinos.

El Boom Hispanoamericano

A partir de la vanguardia europea, surgen temas urbanos y existenciales, y se funden realidad e imaginación, lo que culmina en el boom hispanoamericano. Este movimiento se caracteriza por la mezcla de lo fantástico y real, la ruptura de la linealidad narrativa, el uso del monólogo interior y el contrapunto, con una fuerte implicación social e histórica.

Miguel Ángel Asturias, con El señor Presidente, inaugura las novelas sobre dictadores, antecedido por Tirano Banderas de Valle-Inclán. Le siguen Yo, el Supremo, de Augusto Roa Bastos, y El otoño del patriarca, de Gabriel García Márquez. Alejo Carpentier emplea un estilo barroco en El siglo de las Luces. José Lezama Lima, en Paradiso, ofrece una novela densa, culta y barroca. Jorge Luis Borges, en El Aleph e Historia Universal de la Infamia, mezcla relato y ensayo, creando universos paradójicos y filosóficos.

Ernesto Sábato, en Sobre héroes y tumbas, presenta una visión trágica y apocalíptica. Julio Cortázar une lo cotidiano y lo fantástico en Bestiario, y propone nuevas formas de lectura en Rayuela. Juan Rulfo, con Pedro Páramo, introduce técnicas innovadoras para retratar la miseria y violencia del mundo rural. Carlos Fuentes, en La muerte de Artemio Cruz, narra la decadencia de los ideales revolucionarios. Gabriel García Márquez, en Cien años de soledad, crea Macondo como símbolo de Hispanoamérica.

Mario Vargas Llosa, en La ciudad y los perros, critica la violencia institucional en un colegio militar. Juan Carlos Onetti, en El astillero, expresa su pesimismo a través de mundos decadentes.

Narrativa Posterior al Boom

La narrativa posterior al boom mantiene técnicas experimentales, pero con menor exigencia para el lector. Se potencia la novela histórica, el enfoque autobiográfico, el desdoblamiento del narrador y la ambientación urbana. Destacan autores como Guillermo Cabrera Infante (Tres tristes tigres), Jorge Edwards (Los convidados de piedra), Alfredo Bryce Echenique (Un mundo para Julius), Antonio Skármeta (Ardiente paciencia), Isabel Allende (La casa de los espíritus) y Ángeles Mastretta (Arráncame la vida).

Conceptos Lingüísticos

Descubrimiento

La palabra descubrimiento es un sustantivo cuyo morfema derivativo prefijo (MD pref) es des-. Su raíz es -cubri-. El morfema derivativo sufijo es -miento. Se trata de una palabra derivada.

Sinonimia

Fenómeno lingüístico que consiste en que varios significantes compartan el mismo significado (rey y monarca; veloz y rápida).

Antonimia

Fenómeno lingüístico que consiste en que una palabra tenga un significado opuesto o contrario a otra. Pueden ser:

  • Graduales: (caliente y frío)
  • Complementarios: (vivo y muerto)
  • Recíprocos o inversos: (pagar y cobrar)

Polisemia

Fenómeno lingüístico que consiste en que a un significante le correspondan varios significados (banco).

Homonimia

Fenómeno lingüístico que consiste en que dos palabras distintas coincidan en el significante, bien sea escrito (homografía) o hablado (homofonía). Llama (procedente del latín FLAMMA) y llama (procedente del quechua) son palabras homógrafas; hola (saludo) y ola (onda que se produce en una masa de agua) son palabras homófonas.

Hiperonimia e Hiponimia

El hiperónimo es la palabra que tiene un significado genérico que incluye a otras voces más específicas, que son sus hipónimos (fruta es un hiperónimo en relación con pera, manzana o naranja, que son sus hipónimos).

Reflexión sobre el Error

Resumen

Los errores pueden entenderse como oportunidades de aprendizaje y no solo como fracasos. Equivocarse a veces lleva a descubrimientos valiosos e inesperados. La percepción del error varía según la cultura y puede influir en cómo se enfrentan los desafíos. Asumir los errores como parte del proceso ayuda al crecimiento personal y colectivo.

Tema

El error como oportunidad de aprendizaje y avance.

Tipo

Texto expositivo-argumentativo.