La Creatividad

Es un proceso formado por 4 periodos, en los que intervienen la conciencia y el inconsciente.

Periodo de trabajo intenso consciente

En el que se adquieren conocimientos del problema y se realizan pruebas (por método ensayo y error) para buscar la solución (frec. Sin éxito)

Periodos inconscientes de incubación

Que se producen gracias a interrupciones en la rutina, en donde la mente inconsciente sigue trabajando en el problema en segundo plano, porque la mente consciente está ocupada en cuestiones más irrelevantes.

Momento de intuición

Que consiste en que una nueva idea, que es el punto de partida o guía para llevar a cabo una solución, irrumpe en la conciencia. No tiene por qué llevar al éxito.

Periodo consciente para desarrollar una idea

En la que la mente va desplegando razonamientos y la lógica en la dirección que apunta su intuición. Esto permite evaluar el alcance y profundidad de le nueva idea y comprobar si realmente conduce a la solución buscada.

Si es idea fértil conducirá a la un resultado correcto, si no volver a empezar.

La Estética

Es la rama de la filosofía que se ocupa del arte y de la belleza

Arte

Creaciones mediante las cuales el ser humano expresa una visión sensible en torno al mundo que lo rodea, sea este real o imaginario. Expresa ideas o emociones a través de recursos plásticos, lingüísticos o sonoros, está caracterizada por ser un objeto singular en el que el artista es caracterizado por su creatividad y el espectador, mediante la experiencia estética interpreta la obra como símbolo.

Belleza

Es la mayor aspiración artística, conjuga armonía de fermas, impacto expresivo, potencial simbólico y verdad filosófica con la finalidad de conmover, impresionar y deleitar. Es una noción que no es propia del arte, sino también de la belleza natural, artificial, interior, exterior, entre otras…

Artista

Es aquel que crea objetos pensados para ser gozados o contemplados (obras de arte). Caracterizados principalmente por su creatividad, sus obras son una creación original y son el resultado de un trabajo premeditado.

Experiencia Estética

Vivencias y emociones que se despiertan en el espectador ante un paisaje o una obra de arte, supone una ruptura de la cotidianidad y darnos cuenta de que nos encontramos ante algo único nos produce una sensación de asombro. Nace de una relación desinteresada del espectador con lo que contempla, esa actitud permite captar su significado. Deja al espectador en un estado de admiración y existe un distanciamiento respecto al objeto que se contempla para no confundir la obra ficticia con la realidad.

Arte Como Símbolo

La obra de arte comunica sentimientos y emociones, por ello es una actividad simbólica. El espectador es el receptor y al mismo tiempo el que la dota de significado, aspira a comprender e interpretar la obra desde su interior. Para que la comprensión sea completa tiene que haber un acto de comprensión del sujeto y la obra tiene que completar al espectador al provocarle un momento de intenso placer estético. Entre la obra y su significado hay un vínculo no convencional, la obra en sí contiene la clave para su comprensión. La comprensión definitiva no es posible, cada aproximación es una interpretación nueva, una experiencia estética original.

Sentidos y Entendimiento

El placer que produce la experiencia estética se inicia en los sentidos. Si el placer se queda en la sensación se denomina sensación agradable. En la experiencia estética se trasciende la sensación, es una experiencia más profunda de lo agradable debido al componente intelectual. Intervienen las mismas facultades que en el conocimiento. La información de los sentidos ocupa un lugar central. Al conocer un objeto, se alcanza un concepto con el que no se necesita información captada por los sentidos.

La Tragedia. Aristóteles

Toda tragedia tiene tres partes (inicio, nudo y desenlace). La trama (cadena de acontecimientos que se van trenzando y que dan lugar al relato) es la más importante de la obra. Una trama bien elaborada tiene que enlazar cada una de las partes de la obra de forma necesaria, tiene que desarrollarse según una lógica interna basada en la necesidad y en el inseparable ligazón entre inicio, nudo y desenlace. La idea de necesidad distingue la ficción de la realidad histórica. La verosimilitud no depende del realismo de los personajes. La grandeza de la tragedia es la capacidad de rebelar la falta de correspondencia entre las cualidades morales de un hombre y las circunstancias que le toca vivir. Para ser feliz hay que ser virtuoso.

Catarsis: Efecto más importante que la tragedia provoca en el espectador, su purificación. El sufrimiento que soporta el héroe provoca compasión y piedad, vislumbrar la lógica interna del relato es un hecho placentero porque permite apreciar la unidad de la obra y tomar distancia de los sentimientos de los personajes y se da cuenta que su sufrimiento no es comparable con el del héroe.

Nietche: en la tragedia se representan dos principios, dos planteamientos vitales opuestos. Dionisos, que representa la vida, y Apolo, que representa la razón. En la tragedia, el elemento dionisiaco estaba representado por el coro, que descubria la fuerza irresistible de la vida bajo el destino trágico, la aceptación de que el sufrimiento es necesario para que fluya la vida. El desarrollo continuado del arte esta ligado a la duplicidad de lo apolíneo y lodionisiaco. La pretensión de imponer un orden racional al mundo hizo triunfar al induviduo teorico, apolíneo, sobre el individuo trágico o dionisiaco.