Arquitectura Románica: Historia, Características y Evolución en la Edad Media
Contexto Histórico: Arquitectura Románica
El Románico es el arte de la plena Edad Media y del Feudalismo. El estilo artístico se adapta a una sociedad inculta, controlada intelectualmente por la Iglesia. Por eso va a ser el arte de la irracionalidad, el oscurantismo y el misterio.
Las influencias romanas en él son innegables; de ellas procede el concepto de Románico. Su proceso de creación fue lento y ocurrió simultáneamente en sus precedentes: el Arte Carolingio en Francia, el Arte Otoniano en Alemania, el Lombardo en Italia o el Prerrománico en España.
Los monasterios se convirtieron en centros de poder y de cultura. La construcción de abadías y las peregrinaciones (a Tierra Santa, a Roma, a Santiago de Compostela), estilo calificado como “Arte de los peregrinos”, jugaron un papel importante en la difusión de este arte.
Es considerado como la manifestación artística de la sociedad feudal, exhibiéndose el poder a través del arte. La nobleza fue la encargada de construir los primeros castillos, mientras que los obispos mostraban su poder construyendo monasterios y catedrales, monumentos en honor a Dios, a Cristo triunfante y a la Virgen.
Fases del Románico
Primer Románico:
Es un arte pobre y funcional, aunque se generalizan las bóvedas de cañón, los arcos fajones y las cúpulas sobre el crucero.
Románico Pleno:
Época de máximo desarrollo del estilo. Aparecen las girolas y se desarrollan las tribunas y los transeptos (cruceros).
Románico Tardío:
Se realizan importantes catedrales románicas por toda Europa, aunque ya conviviendo a fines del siglo XII con elementos que anuncian los inicios del estilo Gótico.
Características de la Arquitectura Románica
Casi todos los elementos de la arquitectura románica (muros de sillares, columnas, pilares, arcos de medio punto…) pueden encontrarse en los estilos precedentes, pero ahora aparecen con un espíritu nuevo, importando más sus valores espaciales que su apariencia formal.
La mayor parte de las construcciones son edificios religiosos (iglesias, catedrales y monasterios), aunque no faltan las construcciones civiles (palacios urbanos y castillos).
Se generalizan las plantas de cruz latina. En el Románico hay otros tipos de plantas: de cruz griega, centralizadas, basilicales, etc.
Cuando las naves son más de una y las laterales se prolongan envolviendo el presbiterio, dan lugar a la girola.
En iglesias más monumentales, sobre las naves laterales puede haber una galería abierta mediante arcadas a la nave central, con el nombre de tribuna.
En torno a la girola puede haber pequeñas capillas radiales y, a veces, también en los brazos del transepto, conocidas con el nombre de absidiolas.