Descartes

1. Identificación y explicación del texto

1. Razón y método:

Para Descartes, las distintas ciencias y saberes son manifestaciones de un saber único. Puesto que la razón es única, interesa saber cuál es su estructura y su funcionamiento propio, a fin de que sea posible aplicarla correctamente y alcanzar conocimientos verdaderos y provechosos. Distingue 2 modos de conocimiento:

  • Intuición: luz natural, por ello captamos los objetos simples sin que quede posibilidad alguna de error.
  • Deducción: intuición sucesiva de las naturalezas simples y de las conexiones entre ellas.

Una vez que conoce y ha estudiado la estructura de nuestra razón, está ya capacitado para formular el método. Descartes define el método como el conjunto de reglas ciertas y fáciles que hacen imposible tomar lo falso por verdadero. Pretende que en filosofía se llegue a lo mismo que en matemáticas, que no quede ninguna duda. Parte de la duda metódica (dudar de todo hasta llegar a la verdad absoluta) que es una duda teorética (basada en creencias y no se extiende a la moral ni a la religión) y universal (aquella que se extiende a todos los juicios). Tiene 3 niveles:

  • Duda de los sentidos: no son una fuente de conocimiento. Muchas veces nos engañan.
  • Duda del mundo exterior y de los productos de la imaginación: cuando soñamos sentimos experiencias semejantes a las que tenemos despiertos sin poder hablar de un criterio de distinción entre el sueño y la vigilia.
  • Duda del buen funcionamiento de la propia razón humana: cabe la posibilidad de haber sido creado por un geniecillo maligno que nos hace creer una cosa cuando no es cierta.

Descartes elabora la regla del método:

  • Evidencia: consistía en no admitir cosa alguna como verdadera si no se la había conocido evidentemente como tal.
  • Análisis: exigía que dividiese cada una de las dificultades a examinar en tantas parcelas como fuera posible y necesario para resolverlas más fácilmente.
  • Síntesis: requería conducir por orden las reflexiones comenzando por los objetos más simples y más fácilmente cognoscibles, para ascender poco a poco hasta el conocimiento de los más complejos.
  • Enumeración: debería realizar recuentos tan completos y revisiones tan amplias que pudiese estar seguro de no omitir nada.

Cuando ha elaborado las reglas del método que él va a emplear, afirma el hecho por el que la existencia y el pensamiento se dan simultáneamente, ya que tiene que haber un sujeto pensante que dude y se equivoque. Es decir, puede dudar de todo, pero no puede dudar de que existe como pensamiento. Es la primera evidencia y Descartes la expresa como “cogito ergo sum” (pienso, luego existo). El cogito ergo sum es el principio basado en la idea clara y distinta en la que se debe fundar todo el edificio de la filosofía y el saber; no es una deducción, sino una intuición, la percibe clara y no es un silogismo. El criterio de certeza es que todo cuanto percibe con claridad y distinción será verdadero y podrá afirmarlo.

Empieza a deducir que el pensamiento recae sobre las cosas; interesa saber cómo es cada cosa. Existen 3 tipos de ideas:

  • Adventicias: ideas normales.
  • Facticias: ideas que son producto de nuestra imaginación.
  • Innatas: ideas que el ser tiene por sí mismo. Partes racionales son Dios, alma y mundo.

2. Justificación

A partir del cogito se incluye el yo existente como una sustancia. Descartes define la sustancia como una cosa que existe de tal modo que no necesita ninguna otra para existir. A cada sustancia le corresponde un atributo principal inseparable de la sustancia.

  • Sustancia pensante (res cogitans): el atributo fundamental de esta sustancia es el pensamiento o consciencia. Descartes diferencia el alma y el cuerpo, con lo que establece un dualismo. Al alma solo pertenece el pensar, mientras que el cuerpo pertenece a la extensión y se rige por las leyes de la física.
  • Sustancia infinita (res infinita): para Descartes, el yo pensante no es perfecto, es finito, limitado, pero posee la idea de perfección; la finitud que reconoce es lo contrario de la infinitud. Dios es la garantía de la veracidad, todo cuanto hay en nosotros viene de Dios. Descartes admite el argumento ontológico de San Anselmo: la existencia es una perfección. Dios tiene todas las perfecciones, luego Dios tiene la existencia.
  • Sustancia extensa (res extensa): Descartes coincide con el mecanicismo de los científicos de la época. Todo se reduce a materia y movimiento, y la materia no es otra cosa que la extensión. Dios es la primera causa del movimiento y conserva siempre la misma cantidad de movimiento en el mundo. Admite las 3 leyes de la naturaleza que son a priori:
    • Principio de inercia.
    • Movimiento.
    • Conservación del movimiento.

La característica de la extensión le permite a Descartes aplicar la geometría y las matemáticas como medios de análisis de la realidad material.

3. Relación de Descartes con Ortega y Gasset

Relaciono a Descartes con Ortega y Gasset. Ambos son racionalistas, pero si bien la razón de Descartes es pura, Ortega une al concepto de razón el concepto de vida.

El raciovitalismo es una postura filosófica original que se funda en el concepto de razón vital. La razón vital se puede describir con estos rasgos:

  • La vida, como realidad radical, dinámica, que se hace a sí misma continuamente, exige siempre saber a qué atenerse; es decir, exige un concepto particular de razón que es la que le orienta en el proceso mismo de su propia formación.

Esta razón vital será al mismo tiempo de tipo:

  • Biológica.
  • Histórica.
  • Biográfica.

El concepto de razón vital se opone tanto al vitalismo como al idealismo racionalista, aunque recupera algunos rasgos de ambas perspectivas. La razón vital es la misma vida humana que va más allá de la pura razón; es constitutivamente histórica, se hace en la historia: esta razón histórica no es un factum (hecho acabado), sino algo que fluye, que está en constante devenir.

Razonar significa referir algo a la totalidad de la vida. La vida misma, cuando se inserta en su contexto, es cuando se razona y se entiende. Por eso, la vida misma funciona como razón.

Esa razón vital que lleva a comprender “yo soy yo y mis circunstancias” se explica como:

  • “Yo soy yo”: la vida se individualiza. La persona humana tiene que ser auténtica y conservar su vida íntima, su consciencia sin perder la visión del mundo exterior.
  • “Y mis circunstancias”: mi vida no soy yo solo, sino toda la realidad que me rodea. Junto a la circunstancia aparece la perspectiva. La única forma de acercarse a la realidad del mundo será multiplicando las perspectivas o puntos de vista acerca del mundo y asumir esa irreductible multiplicidad. De ahí que la perspectiva se encuentre emparentada a una circunstancia; no solo biológica y humana, sino también histórica.

4. Actualidad de Descartes

La actualidad del pensamiento cartesiano es evidente en dos aspectos: la importancia que Descartes le dio a las matemáticas y la sospecha de que el mundo que creemos que es real no sea más que una ilusión de nuestros sentidos.

En cuanto a la primera idea, el conocimiento de las cosas se consigue cuantificándolas. Lo real se identifica con lo matematizable. Lo más actual en este sentido es el valor de la informática, ya que el buen funcionamiento de los ordenadores se toma como ejemplo de cómo funciona la mente humana.

En cuanto a la segunda idea, hay que decir que el desarrollo tecnológico nos puede llevar a plantearnos si nuestro mundo no es más que un submundo ante otra realidad que no conocemos. La física de hoy día también ha hecho descubrimientos al respecto. La teoría de la relatividad de Einstein desmonta la idea de un espacio y un tiempo absolutos. La realidad, el tiempo y el espacio son relativos y, por eso, nuestra forma de ver el mundo, nuestra realidad, está condicionada por el lugar que ocupamos.