Las funciones ejecutivas son un conjunto de habilidades cognitivas de alto nivel que permiten la planificación, el control y la regulación del comportamiento. Estas funciones son cruciales para la adaptación al entorno y la consecución de metas, y están intrínsecamente ligadas a la actividad del lóbulo frontal del cerebro.

Anatomía Funcional del Lóbulo Frontal

Área Precentral: Corteza Motora Primaria

  • Controla movimientos específicos de distintas partes del cuerpo.
  • Las lesiones en estas áreas producen parálisis.
  • Funcionalmente, existen varias áreas motoras primarias.

Componentes de la Corteza Frontal Motora

La corteza frontal motora se subdivide en varias áreas clave:

  • Área Motora Primaria
  • Área Premotora
  • Área Motora Suplementaria
  • Campo Ocular Frontal
  • Área de Broca

Área Premotora: Generación de Patrones de Movimiento

  • Aferencias: Tálamo, Ganglios Basales (G.B.), Corteza Sensorial.
  • Eferencias: Corteza Motora Primaria.
  • Generación de patrones de movimientos complejos.
  • Las lesiones en estas áreas producen apraxias (dificultad para realizar movimientos coordinados).
  • Las lesiones en el lado izquierdo pueden causar alteraciones en el habla y el lenguaje.
  • Las lesiones en el lado derecho se asocian a conductas fragmentadas e impersistencia motora.
  • Las neuronas en esta área codifican la actividad motora en un mapa somatotópico y de trayectoria de movimientos.

Área Motora Suplementaria: Iniciativa y Memoria Procedural

  • Aferencias: Giro Cingulado, Tálamo, Corteza Sensorial y Prefrontal.
  • Eferencias: Corteza Premotora y Motora Primaria.
  • Fundamental para la iniciativa motora y la memoria procedural (memoria de cómo hacer las cosas).

Campo Ocular Frontal (Área Visual Frontal)

  • Aferencias: Corteza Parietal (información espacial, “dónde”) y Temporal (reconocimiento de objetos, “qué”).
  • Eferencias: Núcleo Caudado, Colículo Superior, Formación Reticular.
  • Función: Selecciona blancos visuales y comanda sacadas visuales (movimientos rápidos de los ojos).

Área Prefrontal: Integración y Funciones Cognitivas Superiores

El área prefrontal es el centro de integración de información de diversas cortezas heteromodales, incluyendo la corteza sensorial, la corteza límbica y estructuras subcorticales.

  • Las lesiones en esta área se asocian a alteraciones significativas en la planificación y el juicio.
  • La desconexión de aferencias y eferencias frontales podría explicar la disociación ideo-afectiva observada en algunas psicosis.

Funciones Atencionales del Lóbulo Frontal

El lóbulo frontal juega un papel crucial en la atención, aumentando el nivel de vigilancia y la selectividad atencional. Las lesiones en estas áreas pueden producir lentitud e impersistencia en las respuestas.

  • Despertar: Afectado por lesiones frontales que se extienden al diencéfalo y al Sistema Activador Reticular Ascendente (SARA).
  • Dirección de la Atención: Principalmente asociada al área frontal derecha.
  • Atención Selectiva: Relacionada con la región dorsolateral derecha.
  • Control de la Interferencia: Involucra las áreas orbitofrontal y frontal medial.

Funciones de Memoria del Lóbulo Frontal

Las disfunciones frontales pueden manifestarse en la memoria de diversas maneras:

  • Incapacidad para usar el contexto al evocar información.
  • Dificultad para recordar hacer cosas si no se realizan inmediatamente.
  • Incapacidad de abstraerse de interferencias ambientales y asociaciones internas.

En experimentos de respuesta diferida, las neuronas prefrontales muestran actividad sostenida durante todo el período previo al inicio del acto motor, lo que subraya su rol en el mantenimiento de la información relevante para la acción.

Modelo de Memoria de Trabajo y el Lóbulo Frontal

El lóbulo frontal es fundamental para la memoria de trabajo, un sistema que permite mantener y manipular información temporalmente. Un modelo común incluye:

  • Bucle Fonológico: Procesamiento de información verbal y lingüística.
  • Agenda Visoespacial: Procesamiento de información visual y espacial (qué y dónde).
  • Regulador Episódico: Reorganización e integración de la información de los subsistemas con la memoria a largo plazo.
  • Ejecutivo Central: Componente principal que dirige la atención, enfoca los recursos cognitivos y permite el cambio de “set” mental.

Las neuronas prefrontales codifican la certeza con la que las claves predicen una recompensa, mientras que las neuronas orbitofrontales codifican el valor relativo de la recompensa, ajustándose a las diferencias de apariencia y significado según el contexto.

En esencia, la función frontal permite suspender el procesamiento superficial y considerar múltiples hipótesis de ejecución, facilitando una toma de decisiones más compleja y adaptativa.

Impacto en las Funciones Cognitivas

Aunque el desempeño en pruebas formales de inteligencia puede ser normal en individuos con disfunción frontal, la dificultad principal radica en:

  • Usar el contexto para dirigir las decisiones al ejecutar una conducta.
  • Un déficit en pruebas que exigen un cambio en la estrategia de respuesta o la generación de respuestas originales.

Componentes Clave de las Funciones Ejecutivas Afectadas por Lesiones Prefrontales

Las funciones ejecutivas, a menudo afectadas por lesiones prefrontales, incluyen:

  • Cambio (Shifting): La capacidad de alternar entre diferentes tareas o “sets” mentales.
  • Actualización (Updating): El monitoreo y la modificación de la información en función de su relevancia para la acción en curso, reemplazando información antigua por nueva y más importante.
  • Inhibición (Inhibition): La supresión de respuestas dominantes, automáticas o predominantes que no son apropiadas para la situación.

Manifestaciones de la Disfunción Ejecutiva

La disfunción ejecutiva se manifiesta como una dificultad para cambiar de respuestas conocidas como relevantes, lo que lleva a una rigidez de conducta. La incapacidad para suprimir respuestas automáticas compromete el aprendizaje.

En casos más extremos, pueden observarse conductas de imitación y utilización (el paciente imita acciones o utiliza objetos de forma automática sin un propósito claro). Las conductas perseverativas, donde la función ejecutiva se “engancha” en elementos internos en lugar de adaptarse al contexto externo, son también comunes.

El cerebro opera en un “modo directo” que realiza un procesamiento superficial para satisfacer necesidades inmediatas. Las funciones de las áreas prefrontales inhiben este modo directo, promoviendo una concepción contextual y “premonitoria” de la realidad, lo que permite anticipar y planificar.

Lesiones Prefrontales y la Autorregulación del Comportamiento

La autorregulación del comportamiento es la capacidad de generar conductas adaptadas al medio y a la historia del individuo, considerando tanto el contexto externo como el contexto interno (la concepción de uno mismo con continuidad temporal, un pasado y una proyección futura).

Tipos de Toma de Decisiones

Existen dos formas principales de toma de decisiones:

  • Verídica: Determinada por factores externos, directamente desde la tarea o el entorno.
  • Adaptativa: Centrada en el individuo, a menudo ambigua, basada en las preferencias y el “sí mismo” del sujeto más que en la elección objetivamente “correcta”.

Definición de Autorregulación Conductual

La autorregulación del comportamiento es la capacidad de regular la conducta según los objetivos propios del individuo y las restricciones presentes. Esta habilidad resulta de la capacidad de mantener en mente una representación de sí mismo y de usar esa representación para inhibir respuestas inapropiadas, permitiendo un comportamiento flexible y dirigido a metas.