Johann Sebastian Bach: El Genio del Contrapunto Barroco

Johann Sebastian Bach (1685-1750) fue una figura central del Barroco musical. Su trayectoria profesional incluyó roles como organista, maestro de capilla del duque de Weimar, director del príncipe de Cöthen, y el prestigioso cargo de cantor y director musical de la Escuela de Santo Tomás de Leipzig. Bach poseía una profunda tradición artesanal, dedicándose a la copia de partituras, y su concepción religiosa del fundamento del arte se fusionaba con un genio personal inigualable. Abordó prácticamente todas las formas musicales de su época, con la notable excepción de la ópera.

Obras para Órgano

La producción organística de Bach muestra una síntesis magistral de influencias alemanas, francesas e inglesas. Sus obras para este instrumento destacan por su profunda adecuación al mismo, trascendiendo el mero virtuosismo para explorar la expresión musical. Entre ellas se encuentran:

  • Preludios y Fugas: Ejemplos notables incluyen la Tocata y Fuga en Re menor (BWV 565), la Fantasía y Fuga en Sol menor (BWV 542) y el Preludio y Fuga en Mi bemol mayor (BWV 552, conocido como “Santa Ana”).
  • Sonatas en Trío: Compuestas para su hijo Wilhelm Friedemann Bach, estas sonatas están concebidas para un solo instrumento (el órgano), con una forma que alterna secciones rapsódicas, lentas y rápidas, mostrando una clara influencia italiana.
  • Preludios Corales: Como el célebre Pequeño libro de órgano (Orgelbüchlein). Bach fue exhaustivo y pedagógico en su enfoque, utilizando el pedal en obbligato y destacando la melodía principal en la soprano. Durante su periodo en Leipzig, compuso numerosos corales y tres antologías importantes.

Música para Clave

Para el clave, Bach compuso una vasta colección de obras que exploran las posibilidades técnicas y expresivas del instrumento:

  • Tocatas: Incluyendo la famosa Fantasía cromática y fuga en Re menor (BWV 903).
  • El clave bien temperado (BWV 846-893): Una colección fundamental de preludios y fugas en todas las tonalidades mayores y menores.
  • Suites para clave: Como las Suites francesas y las Suites inglesas.
  • Concierto en estilo italiano (BWV 971).
  • Variaciones Goldberg (BWV 988): Un ciclo monumental de variaciones.

Obras para Violín, Violonchelo y Flauta (Solos)

Bach exploró la polifonía en instrumentos melódicos solistas, creando obras de profunda complejidad y belleza:

  • Seis sonatas y partitas para violín solo (BWV 1001-1006).
  • Seis suites para violonchelo solo (BWV 1007-1012).
  • Una sonata para flauta sola.

En todas estas composiciones, se aprecia una impresionante textura contrapuntística y la sugerencia de múltiples cuerdas o líneas melódicas aisladas.

Sonatas para Conjunto

Estas obras combinan un instrumento solista con el clave. Generalmente en cuatro movimientos, la mano izquierda del clave asume el bajo continuo (BC), mientras que la derecha funciona como instrumento solista, dialogando con el otro instrumento.

Conciertos

La producción concertística de Bach es variada y fundamental para el repertorio barroco:

  • Seis conciertos de Brandeburgo (BWV 1046-1051): Obras maestras del concierto barroco.
  • Conciertos para violín solista.
  • Conciertos para dos violines y orquesta (siete en total).
  • Arreglos para clave y orquesta.
  • Concierto para cuatro claves y orquesta (arreglo de Vivaldi).

Suites para Orquesta

Bach compuso cuatro suites orquestales. Las suites tercera y cuarta están concebidas para interpretaciones al aire libre, incorporando trompetas, timbales, cuerda y madera.

Otras Obras Instrumentales

  • La ofrenda musical (BWV 1079): Una improvisación sobre un tema de Federico el Grande, que incluye dos ricercare y una sonata a trío (flauta, violín y bajo continuo).
  • El arte de la fuga (BWV 1080): Una obra monumental e incompleta, compuesta por dieciocho cánones y fugas sobre el mismo sujeto.

Música Vocal

Cantata

Las cantatas de Bach, con recitativos y arias, generalmente para soprano solista y bajo continuo, presentan textos líricos o amatorios y tienen una duración aproximada de 15 minutos, sin escenografía. En Alemania, las cantatas podían tener texto italiano o alemán. En Inglaterra, destacaron compositores como John Blow y Henry Purcell en este género.

Las cantatas de Bach se clasifican principalmente en:

  • Cantatas Eclesiásticas: Con una orquesta acompañante, ocupaban un lugar preeminente en la liturgia luterana, con temas vinculados al evangelio. Se conservan unas 200 cantatas de este tipo, muchas de ellas relacionadas con los corales luteranos.
  • Cantatas Profanas: Conocidas como “drama per musica”, como la célebre Cantata de los aldeanos (BWV 212). En estas obras, Bach experimenta con un nuevo estilo galante y operístico.

Otras Formas Vocales

  • Motetes: Composiciones para coro en contrapunto, con texto bíblico y de carácter breve.
  • Magnificat (BWV 243): Una obra a cinco voces.
  • Oratorio de Navidad (BWV 248).
  • Pasiones: Las monumentales Pasión según San Juan (BWV 245) y Pasión según San Mateo (BWV 244), que emplean doble coro, solistas, doble orquesta y dos órganos.
  • Misa en Si menor (BWV 232): Una obra de carácter universal que mezcla el estilo antiguo y moderno, con Kyrie y Gloria (regalo al rey de Polonia) y Credo.

Georg Friedrich Händel: El Maestro del Oratorio y la Ópera Barroca

Georg Friedrich Händel (1685-1759) estudió en la Universidad de Halle y fue organista. Su carrera operística comenzó con Almira (1705), de tema histórico. Durante su estancia en Italia, compuso motetes en latín, un oratorio, y un gran número de cantatas italianas, destacando el triunfo de su ópera Agrippina en Venecia.

En Londres, Händel causó sensación con sus óperas, como Rinaldo (1711). Compuso la célebre Música acuática (1717) y fundó la Real Academia de Música. Sin embargo, el éxito de The Beggar’s Opera (La ópera del mendigo) en 1728 afectó negativamente a sus producciones operísticas. Su primera ópera cómica fue Serse (1738).

Oratorios

Los oratorios de Händel surgieron tras el declive de la ópera italiana en Londres. Los compuso principalmente en inglés, abordando temas bíblicos como El Mesías (1741) e Israel en Egipto (1739). Es importante destacar que, a pesar de sus temas, no son obras litúrgicas, sino que estaban destinadas a la sala de conciertos. También exploró temas mitológicos (Semele, Hércules) y alegóricos (Oda para el día de Santa Cecilia). Algunas de sus obras, como Susana, son casi óperas.

Suites y Sonatas

Händel, siendo un virtuoso intérprete de sus propias obras, compuso:

  • Tres series de conciertos para clave u órgano.
  • Dos antologías de suites para clave.
  • Variaciones.
  • Sonatas solísticas y algunas en trío, mostrando una clara influencia de Corelli.

Conciertos Instrumentales

Además de sus suites y sonatas, Händel compuso importantes obras orquestales:

  • Oberturas de óperas y oratorios.
  • Música acuática (Water Music).
  • Música para los reales fuegos artificiales (Music for the Royal Fireworks).

Su Concierto Op. 6 es de estilo antiguo, con forma de sonata da chiesa; el solista rara vez se diferencia del tutti, con escasos pasajes virtuosos.

Ópera

Händel, un maestro de la imitación y adaptación, compuso óperas como Ottone (1723). Sus preferencias clásicas fueron influenciadas por mecenas como Lord Burlington (Teseo, 1713). Abordó motivos políticos y óperas cómicas (Serse), con temas de magia, aventura y la vida de héroes.

Musicalmente, sus óperas empleaban:

  • Diálogos con recitativo secco.
  • Soliloquios con recitativo obbligato.
  • Arias da capo que expresaban sentimientos.
  • Ariosos breves de tipo veneciano.
  • Sinfonías instrumentales en momentos culminantes.
  • Coros escasos, generalmente con un único cantante por voz.
  • Ballet en algunos casos.
  • Una gran variedad de arias.

Estilo Coral en Oratorios

El estilo coral de Händel en sus oratorios es distintivo. Los coros, donde en una ópera se insertarían arias, los emparentan con el coro griego, ya que participan de la acción y narran episodios. Utiliza un simbolismo musical descriptivo y su estilo es más sencillo que el de Bach, alternando pasajes fugados con sólidos bloques armónicos y cadencias conclusivas. Los libretos en inglés, a menudo con temas de la Edad Media, tocaban la fibra patriótica del público. Es crucial recordar que, a pesar de sus temas, no son músicas religiosas en el sentido litúrgico, y el empleo del coro difiere significativamente del de las óperas.

Conclusión

La obra de Händel, caracterizada por sus “préstamos” o adaptaciones de material musical, ha mantenido un repertorio vivo y relevante. La importancia de su melodía y armonía, siempre de moda, lo consagra como un maestro del contraste. Su música, accesible y atractiva, resonó especialmente con la emergente clase media de su tiempo.