Literatura Española del Siglo XX: Modernismo, Generación del 98, Vanguardias y Posguerra
El Modernismo y la Generación del 98
Tras la crisis de 1898, el siglo XIX provocó una profunda crisis en la cultura occidental, lo que cambió el rumbo artístico y dio paso al Modernismo. Este movimiento surge en Hispanoamérica y se inspira en el Parnasianismo y el Simbolismo. Sus temas fundamentales incluyen la soledad, el escapismo, el cosmopolitismo, el amor y el erotismo. El Modernismo se caracteriza por una renovación métrica y la búsqueda de la perfección formal. Un ejemplo de poesía de carácter parnasiano es Alma de Manuel Machado.
La Generación del 98
La Generación del 98 agrupa a autores con una actitud reflexiva y crítica ante la situación política, social y económica de España. Destaca Antonio Machado, principal poeta del Modernismo, cuya obra se divide en etapas:
- Su primera obra, Soledades, galerías y otros poemas, simboliza su inicio.
- La segunda, Campos de Castilla, muestra su preocupación por España, con descripciones de paisajes castellanos y poemas dedicados a Leonor.
- En su última etapa, publica Nuevas canciones, donde aparece su segundo amor, Guiomar.
El Novecentismo (Generación de 1914)
El Novecentismo, completamente diferente a la literatura realista, es conocido como la Generación de 1914. Sus integrantes confiaban en que la educación y la cultura podían transformar un país en decadencia. Destaca Juan Ramón Jiménez, cuya obra se divide en tres etapas:
- Etapa sensitiva: Estética modernista con obras como Arias tristes, marcada por el simbolismo y Bécquer.
- Etapa intelectual: Influencia de poetas ingleses, búsqueda de la eternidad y la duración poética, alejándose de lo ornamental y buscando la esencia y lo puro. A esta etapa pertenece Diario de un poeta recién casado.
- Etapa verdadera: Comprende toda su producción durante el exilio. En 1956, recibió el Premio Nobel de Literatura. Su ansia por la trascendencia le llevó a identificarse con Dios.
La Literatura de Vanguardia
En la literatura de vanguardia, los artistas se sitúan en la avanzadilla cultural del momento. Algunas vanguardias dejaron una profunda huella en el arte posterior, siendo su mayor logro la imposición de la libertad total del artista, beneficiando así al arte subsiguiente.
El Surrealismo
El Surrealismo fue un momento vanguardista de gran influencia en España, especialmente visible en los poetas de la Generación del 27, quienes quedaron profundamente marcados por este movimiento. Ejemplos claros son Sobre los ángeles de Rafael Alberti o Poeta en Nueva York de Federico García Lorca. El Surrealismo supuso la crisis de la idea de pureza y la deshumanización, permitiendo que lo social, político y humano penetraran en la literatura.
Otras Vanguardias
El Futurismo
Fundado por Marinetti en 1909, el Futurismo exalta los avances de la tecnología, la búsqueda de la belleza en el riesgo, la velocidad y la acción, así como la ruptura de las normas tipográficas. En España, Ramón Gómez de la Serna publicó El Prometeo, su manifiesto, en 1910.
El Ultraísmo
El Ultraísmo presentó su primer manifiesto en la revista Cervantes en 1919. Sus principales características son la independencia de la metáfora y la imagen, el desdén por lo ornamental y el desprecio de los sentimientos. Su principal impulsor fue Guillermo de Torre.
El Teatro Español del Siglo XX (hasta 1939)
Tendencias Teatrales Previas al 98
Comedia Burguesa de Benavente
Caracterizada por un diálogo natural y fluido, suave ironía, y una crónica y crítica amable a la burguesía. Su obra Los intereses creados le valió el Premio Nobel en 1922.
Teatro Cómico
- Hermanos Álvarez Quintero: Destacan por obras como El genio alegre.
- Muñoz Seca: Conocido por situaciones graciosas y juegos de palabras que provocan risa.
Teatro en Verso
Utiliza un verso modernista, sonoro y musical, con temas centrados en la historia y la religión.
El Teatro del 98
Propone nuevas formas dramáticas:
- Unamuno: Apostó por el “teatro desnudo” (sin decorados ni vestuarios) y conflictos que obsesionan al hombre. Ejemplo: El otro.
- Azorín: Incluye lo subconsciente y maravilloso, con temas como el tiempo y la muerte.
Ramón María del Valle-Inclán
Su obra teatral se divide en ciclos:
- Ciclo modernista: El Marqués de Bradomín, que dramatiza el adulterio y critica la religión y la burguesía.
- Etapa de transición: Comedias Bárbaras, ambientadas en una Galicia de sociedad arcaica, donde el mundo se deja llevar por fuerzas instintivas.
- Ciclo del Esperpento: Caracterizado por la hipérbole, la deformación de la realidad y las caricaturas. Mezcla tragedia, farsa y parodia, con un tono de burla y una fuerte crítica a la sociedad española. Su obra cumbre es Luces de Bohemia.
Federico García Lorca
Lorca impulsó una renovación del teatro, incluyendo elementos líricos y simbólicos:
- Teatro modernista: Mariana Pineda.
- Farsas: Retablillo de don Cristóbal.
- Comedias imposibles: Así que pasen cinco años.
- Ciclo trágico: Bodas de sangre y La casa de Bernarda Alba. Estas obras se centran en la protagonización de las mujeres y abordan temas como la frustración, el amor, la esterilidad, la muerte y los enfrentamientos fratricidas. Se estructuran en torno a dos fuerzas opuestas: el principio de autoridad (Bernarda) y el principio de libertad (Adela).
La Generación del 27: Poesía y Vanguardia
El grupo poético conocido como Generación del 27 recibió su nombre al unirse sus integrantes para conmemorar el tricentenario de la muerte de Góngora en 1927, reivindicándolo como su principal referente poético.
Características Comunes y Estilo
Aunque la poesía de cada autor presenta un estilo particular, compartían ciertas características:
- Predominio absoluto de la metáfora y el hermetismo (identificándose con Góngora).
- Influencia de las vanguardias (especialmente el Surrealismo).
- Temas recurrentes como el amor y la naturaleza.
- Mezcla entre la tradición popular y los elementos cultos.
- Uso de una métrica variada (formas tradicionales y verso libre).
Influencias y Evolución
Además de Góngora y las vanguardias, sus influencias incluyen al filósofo Ortega y Gasset y al poeta Juan Ramón Jiménez. Los críticos han establecido tres etapas en la evolución del grupo:
- Primera etapa (fundacional): Se manifiestan de forma más marcada y unitaria los rasgos comunes.
- Segunda etapa: Aumenta la influencia del Surrealismo, y una parte del grupo evoluciona hacia una poesía más politizada y social.
- Tercera etapa (a partir de 1936): La Guerra Civil Española rompe la unidad del grupo. Lorca es asesinado al inicio del conflicto, y parte del grupo se exilia (como Pedro Salinas) o al finalizar la guerra (como Rafael Alberti). Cada poeta evoluciona en un sentido más personal.
Autores Destacados de la Generación del 27
- Federico García Lorca: Quizá el poeta más importante del grupo, creador de un sistema poético propio donde el mundo popular andaluz cobra enorme fuerza poética. La opresión, la muerte y el tema sexual aparecen con frecuencia en sus versos. Obras destacadas: Romancero gitano y Poeta en Nueva York (de marcada influencia surrealista).
- Rafael Alberti: Otro poeta fundamental con obras como Marinero en tierra y Sobre los ángeles. Su poesía destaca por la influencia surrealista, el neopopularismo (mezcla de elementos tradicionales y vanguardistas) y su compromiso político.
- Luis Cernuda: Reúne toda su poesía en La realidad y el deseo, centrada en el choque entre los sentimientos y la realidad social. Presenta influencias románticas y surrealistas. Libros notables: Un río, un amor y Los placeres prohibidos (que aborda el amor homosexual).
- Vicente Aleixandre: Premio Nobel de Literatura, de honda influencia surrealista (La destrucción o el amor).
- Dámaso Alonso: (Hijos de la ira).
- Gerardo Diego: (Imagen).
- Pedro Salinas: (La voz a ti debida).
- Jorge Guillén: (Cántico, parte de Aire nuestro).
Miguel Hernández: Un Poeta Cercano al 27
Por último, debemos destacar la figura de Miguel Hernández, poeta posterior al grupo del 27, pero cuya obra se desarrolla durante la Segunda República. Parte de la tradición clásica y muestra una intensa emoción humana y un declarado compromiso político. Entre sus obras destaca El rayo que no cesa.
La Poesía Española de Posguerra (1939-1975)
Desde el fin de la Guerra Civil Española en 1939, que dio paso a una dictadura militar, hasta la muerte del General Franco en 1975, que provocó el exilio, la censura y la ruptura de un nuevo ciclo cultural, España experimentó numerosas tendencias poéticas. Destacan las siguientes:
1. Poesía Desarraigada (Posguerra Inmediata)
Dámaso Alonso señaló esta tendencia, cultivada por poetas alejados del régimen franquista y agrupados en torno a la revista España. Reflejaba un mundo caótico y angustiado mediante un lenguaje violento y desganado. Sus temas incluían la realidad de la vida cotidiana y la existencia como lucha con el mundo o consigo misma. La obra más representativa de Dámaso Alonso es Hijos de la ira.
2. Poesía Social (Años 50)
Durante los años 50, la poesía social emergió. Los poetas salieron de su angustia interna para exigir justicia, buscando que la poesía fuera un arma de concienciación política con un estilo directo y sencillo. Autores y obras representativas fueron:
- Cantos y versos de Gabriel Celaya.
- Quinta del 42 de José Hierro.
- Pido la paz y la palabra de Blas de Otero.
3. Poesía del Conocimiento (Años 70 – Generación del 50)
Esta tendencia se desarrolló en los años 70, aunque sus autores son conocidos como la Generación del 50. Eran poetas con una poesía más personal e intimista, convencidos de que la poesía social como arma no había sido eficaz. Al igual que la generación anterior, tenían una profunda preocupación existencial y social, pero también un escepticismo por su desacuerdo con el mundo. Utilizaban un tono coloquial. Obras representativas:
- Grado elemental de Ángel González.
- La memoria de los signos de José Ángel Valente.
- Compañeros de viaje de Jaime Gil de Biedma.
- Donde la ebriedad de Claudio Rodríguez.
Poetas Exiliados y Otras Figuras
Muchos autores, tras la introducción de la dictadura, se vieron obligados a salir de España, pero siguieron publicando desde el exilio. Ejemplos incluyen Juan Ramón Jiménez desde América, buscando la belleza, y algunos de la Generación del 27 como Pedro Salinas o Luis Cernuda.
León Felipe es un autor inclasificable generacionalmente, y escribió Versos y oraciones del caminante.
Otra figura importante es la de Miguel Hernández. Por razones políticas, sus obras no fueron “renovadas” (quizás se refiere a que no fueron publicadas o reconocidas en España durante el franquismo) y se convirtió en símbolo de la literatura comprometida. La obra que corresponde a esta etapa es Cancionero y romancero de ausencias, con un tema amoroso pero con dolor por la ausencia de su esposa, y un estilo próximo al neopopularismo.
El Teatro Español de Posguerra y Actualidad (1939-Presente)
Tras la Guerra Civil, el teatro fue el género más afectado negativamente. Varios renovadores habían muerto, y se impusieron mayores restricciones de posguerra debido a su necesidad de ser representado en público. Durante la larga posguerra, surgieron diferentes tendencias que daban fe de la evolución política e intelectual del país. Las obras de los escritores en el exilio no serían representadas en España hasta finales de los años 60.
Años 40: Simbolismo y Grotesco
En los años 40, el teatro presentaba elementos poéticos y simbólicos, como La dama del alba de Alejandro Casona, y elementos grotescos, como El adefesio de Rafael Alberti. Max Aub, por su parte, se posicionó en contra del antisemitismo europeo y de la vida de los desterrados.
Años 50: Teatro Conservador y de Humor
Hasta los años 50, predominó un teatro conservador que pretendía entretener y moralizar, cultivando la alta comedia benaventina, el sainete costumbrista y el drama burgués. El teatro de humor “sin acidez” y “bienpensante” de Jardiel Poncela presentó cierta innovación; podemos destacar Eloísa está debajo de un almendro. Miguel Mihura escribió en 1936 Tres sombreros de copa, una obra que podría haberse convertido en el referente del teatro del absurdo si no hubiera tardado tanto tiempo en ser representada.
Teatro Realista y de Denuncia (Años 50-60)
En 1949, con Historia de una escalera de Antonio Buero Vallejo, se estrenó el teatro realista. Más tarde, Alfonso Sastre estrenó Escuadra hacia la muerte, donde se denunciaba el belicismo de la época. Ambos autores intentaron remover conciencias a través del teatro. Buero Vallejo es menos fatalista que Sastre; su realismo es simbólico frente al realismo social de Sastre. Buero es posibilista, mientras que Sastre es imposibilista.
El Nuevo Teatro: Vanguardia y Experimentación (Finales de los 60)
A finales de los años 60, apareció el Nuevo Teatro, vanguardista y experimental, que reflexionaba sobre la deshumanización de la sociedad. Se distinguen dos tendencias:
- Una simbólica, como la ya comentada.
- Otra experimental, como la de Francisco Nieva, caracterizada por ser erótica, absurda y utilizar técnicas cinematográficas y surrealistas, con obras como Pelo de tormenta.
Fernando Arrabal se exilió en Francia para dar rienda suelta a su creatividad y escribir un teatro del absurdo y “pánico” sobre política, religión y sexualidad, como Picnic.
Teatro Independiente y Democracia
Dentro del teatro independiente, surgieron grupos como “Los Goliardos” en Madrid y “La Cuadra” en Sevilla, dirigido por el recientemente fallecido Salvador Távora. En la democracia, emergió un teatro underground y alternativo.
En 1983, se fundó la Compañía Nacional de Teatro Clásico, donde se adaptan novelas conocidas. Surgieron nuevos autores-actores como Fernando Fernán Gómez con Las bicicletas son para el verano. Se recuperaron a exiliados como Alberti y a “olvidados” como Lorca y Valle-Inclán.
El teatro de corte más tradicional sigue teniendo éxito, como las obras de Antonio Gala (Anillos para una dama). Dentro de la comedia urbana, destacan José Luis Alonso de Santos (Bajarse al moro), José Sanchis Sinisterra (¡Ay, Carmela!) y Ana Diosdado (Los ochenta son nuestros).
El Teatro Actual
En el teatro actual, destaca Juan Mayorga, quien entiende el teatro como un ejercicio de precisión. Sus diálogos afilados permiten hablar de temas espinosos. Obras notables incluyen Cartas de amor a Stalin. Por último, también podemos citar a la gaditana García Morales (Autora de NN12).