Explorando ‘Nada’ de Carmen Laforet: Un Viaje a Través del Realismo Existencial
Explorando ‘Nada’ de Carmen Laforet
El texto que hemos escogido en el bloque de educación literaria forma parte de Nada de Carmen Laforet. Desde el punto de vista del contexto literario, la obra se incardina en las coordenadas del realismo existencial de los años 40, que supuso el renacimiento novelesco en nuestro país. Las dos fechas clave del realismo existencial son 1942 con La familia de Pascual Duarte de Cela, y 1944 con Nada de Carmen Laforet.
Temas y Corrientes Literarias
Los temas propios de estas novelas pueden reducirse a dos: la incertidumbre de los destinos humanos y la ausencia o dificultad de comunicación personal. Estos novelistas se sitúan en el realismo, pero lo superan con la incorporación de nuevas técnicas, tomadas principalmente de la novela norteamericana de la “Generación perdida”. Por otro lado, La familia de Pascual Duarte y Nada fueron también punto de inicio de lo que se conoció como tremendismo, esto es, el gusto por las narraciones violentas y truculentas, acompañadas por una gran preocupación por el estilo.
En los años 50, dominará el realismo social, caracterizado por el protagonismo colectivo, los ambientes de intemperie, el dominio del diálogo, y temas como la infructuosidad y la soledad social. Se considera de nuevo a Cela precursor de esta corriente con la publicación en 1951 de La colmena. En 1956, con la aparición de El Jarama de Sánchez Ferlosio, se puede decir que esta corriente está consolidada.
La década de los 60 supone el inicio de la novela experimental. En 1962, dos acontecimientos marcan el inicio del declive de la novela social y la incipiente aparición de una nueva novela: la publicación de La ciudad y los perros de Vargas Llosa, anuncio de la llegada de la renovadora narrativa hispanoamericana, y de Tiempo de silencio de Luis Martín-Santos. 1966 será la fecha de consolidación con la publicación de tres obras: Cinco horas con Mario de Delibes, Señas de identidad de Juan Goytisolo y Últimas tardes con Teresa de Juan Marsé. Esta nueva novela se basa en la innovación formal, de forma que el lector debe asumir un papel activo.
Agotada la novela experimental, durante la década de los 70 se producirá un cambio hacia otro modo de novelar, sobre todo a partir de la publicación en 1975 de La verdad sobre el caso Savolta de Eduardo Mendoza. Esta nueva novela se apoya fundamentalmente en el concepto de narratividad, es decir, supone una vuelta al viejo gusto por contar.
Argumento de ‘Nada’
En el plano argumental, Nada, obra de corte existencial con muy poca acción, narra la historia de Andrea, una joven huérfana de 18 años que llega a Barcelona para estudiar Letras en la universidad. Ilusionada con la libertad que supone su nueva vida, se instala en la casa de su abuela en la calle Aribau, un lugar oscuro y decadente que simboliza la miseria y el deterioro tanto material como moral de su familia.
En ese hogar opresivo conviven personajes atormentados: su abuela, sumida en la nostalgia del pasado; su tío Román, un hombre enigmático y manipulador; Juan, su otro tío, violento y frustrado, cuya relación con su esposa Gloria está marcada por los maltratos y la dependencia; y Angustias, la tía autoritaria que trata de imponer a Andrea un control asfixiante. La atmósfera de la casa es sofocante, llena de resentimientos, secretos y tensiones que contrastan con las expectativas de la protagonista.
Fuera de ese mundo claustrofóbico, Andrea encuentra un respiro en la universidad y en su amistad con Ena, una joven de familia acomodada que representa la estabilidad y la vida que ella desearía. Sin embargo, a medida que la relación con Ena avanza, Andrea descubre que la realidad es más compleja de lo que imaginaba, pues incluso las vidas aparentemente felices esconden sus propias sombras.
A lo largo de la novela, el desencanto de Andrea crece. Su sueño de independencia choca con la crudeza de la posguerra española, la pobreza y las relaciones humanas viciadas por el rencor y la frustración. Cuando finalmente abandona Barcelona, lo hace sin grandes certezas ni triunfos, pero con una sensación de alivio y un aprendizaje que, aunque doloroso, la hace más consciente de la dureza del mundo.
El Personaje de Andrea
Andrea, protagonista de Nada, es una joven rebelde, sincera y contraria a los estereotipos femeninos tradicionales. Aunque en un primer momento puede parecer una heroína romántica por su origen humilde, su orfandad y su búsqueda de libertad, pronto se revela como una figura atípica: introspectiva, poco coqueta, distante de los lazos familiares y con una actitud observadora y hermética.
No actúa como protagonista activa, sino como narradora-testigo, alguien que relata lo que vive y presencia, más que intervenir directamente. Ella misma se considera una espectadora de la vida, mostrando una lucidez especial para interpretar su entorno.
Estilo Narrativo
El fragmento de Nada, de Carmen Laforet, pertenece al género narrativo y se enmarca dentro del realismo existencial de los años 40, con rasgos tremendistas. La narración en primera persona a través de Andrea permite una visión subjetiva e introspectiva de los hechos, marcada por la confusión, el miedo y el proceso de maduración de la protagonista.
El estilo impresionista de la obra se manifiesta en descripciones poéticas y sensoriales que reflejan el estado emocional de Andrea, con abundantes recursos literarios como metáforas, sinestesias o personificaciones.
En ciertos momentos, la visión se vuelve expresionista, deformando la realidad para transmitir angustia, y se incluyen escenas tremendistas que muestran la violencia y la crudeza del entorno. Los diálogos contrastan con la narración, adoptando un registro coloquial, vivo y adaptado a cada personaje.
También destaca el fragmentarismo narrativo: la información se ofrece de forma incompleta o ambigua, lo que obliga al lector a reconstruir los hechos y acentúa la tensión psicológica. Esta técnica refleja la opresión social y emocional del entorno, contribuyendo a una visión íntima, simbólica y profundamente emocional de la realidad.