El Árbol de la Ciencia de Pío Baroja: Temas, Estilo y Contexto Literario
Introducción a El Árbol de la Ciencia
Nos encontramos ante un texto literario perteneciente a la novela El árbol de la ciencia, publicada por Pío Baroja en 1911. La estructura externa contiene … párrafos (de intervención dialogada) sumando un total de … líneas agrupadas en ….
En cuanto a las ideas que contiene, las recogemos a continuación en el siguiente esquema numerado. Como hemos podido observar en el esquema de las ideas, la estructura que presenta el texto es cronológica, ya que se relacionan los hechos o datos en la secuencia temporal en que ocurren o aparecen.
La intención comunicativa del autor es reflexiva, ya que nos hace pensar y reflexionar acerca de la necesidad de conocer y si esta es perjudicial o ventajosa para el hombre. También es estética, ya que se trata de un texto literario. Además, nos hace pensar sobre el porqué del título del libro, a través de narraciones como el fragmento sobre la ciencia y el conocimiento.
En cuanto a los mecanismos de cohesión, como solo nos piden dos, nos centraremos en los que consideremos más importantes. Entre ellos destacamos:
- Mecanismos de cohesión léxico-semántica en líneas…
- Mecanismos gramaticales.
Origen del Título: El Árbol de la Ciencia
El título se encuentra en uno de los capítulos, en una de las largas conversaciones entre Andrés y su tío, cuando este comenta la presencia en el Edén de dos árboles importantes: el de la vida y el de la ciencia. Dios prohibió a Adán comer del fruto de este último (Parte 4, capítulo 2).
El árbol de la vida simboliza la inconsciencia, el desconocimiento que precisamente garantiza la felicidad. Baroja, agnóstico, identificó el árbol de la ciencia con la búsqueda de la verdad a través de la razón y la inteligencia. El árbol de la vida representa a los personajes que prefieren vivir en el desconocimiento y el optimismo. En la obra predominan los que optan por lo segundo.
Y es que Andrés no encuentra en la ciencia la respuesta que busca a sus grandes interrogantes sobre el sentido de la vida y el mundo; al contrario, la inteligencia y la ciencia no hacen sino agudizar el dolor de vivir. Así surge la idea que da título a la obra.
Subgénero Narrativo: El Árbol de la Ciencia
El árbol de la ciencia es una novela de personajes, pero también de viaje. Esta unión de subgéneros se llama novela de formación del protagonista, quien va modelando su personalidad desde la juventud a la madurez a través de su “viaje” por el mundo exterior (Valencia, Alcolea del Campo…) y por su mundo interior (lecturas filosóficas del idealismo alemán, conversaciones con su tío Iturrioz).
Se dice que es una novela autobiográfica, pues está basada en la propia vida de Pío Baroja. Al igual que el protagonista, Baroja también estudió medicina. Es sintomático que Baroja hiciera la tesis doctoral sobre el dolor, lo que muestra su pesimismo y estado anímico, que comparte con el protagonista.
Para la creación de su tío se inspira en su propio tío, Justo Goñi, quien ejerció de guía espiritual para él. De la misma manera que Andrés pierde a su hermana pequeña, Baroja perdió a su hermano mayor, Darío. Ambos tuberculosos en la zona de Valencia. Muchos personajes que aparecen en la novela son personas que existieron en la vida del autor. También Baroja ejerció como médico en un pueblo, Cestona, donde trabajó Andrés. Por último, el autor comparte con Andrés la lectura de filosofía.
Temas Principales y Subtemas en El Árbol de la Ciencia
Nos encontramos frente a una novela filosófica. Los conflictos existenciales son el centro de la obra. España, los problemas existenciales y el análisis y reflejo de la intrahistoria son los pilares de las novelas noventayochistas. En este sentido, esta obra es una de las más representativas de la Generación del 98.
Aspecto Existencial
El eje argumental de la obra, incluso el tema de España, está girado en torno a él, y a su vez, en torno al protagonista. Andrés intenta hallar el sentido de su existencia en la religión, la ciencia, la filosofía, el amor… pero en nada de esto halla la felicidad, ni siquiera la paz. Como muchos personajes del 98, Andrés muestra en el transcurso de la obra la dicotomía hombre de acción/hombre de no acción. Al principio combativo, activo, con gran influencia nietzscheana… pero se va hundiendo y aumenta su desencanto con la vida, y solo para abandonarla recupera las fuerzas.
Las dos corrientes del irracionalismo alemán, tan importantes en el pensamiento del 98, vitalismo y pesimismo, aparecen simbolizadas en la figura de Andrés; alter ego de Baroja, pasa de ser un hombre de acción (Nietzsche) al de no acción (Schopenhauer). Kant es quizá el filósofo que está más presente en las conversaciones con su tío, del que toma su imperativo categórico. Andrés no alcanza la felicidad; lo más que consigue es un estado de ataraxia en dos o tres épocas de su vida. Andrés mata la voluntad de vivir.
Subtemas
- Religión: Ni siquiera cree en la utilidad de la fe, la considera peligrosa porque abre una puerta a lo arbitrario. Participa de las ideas de Kant en que los postulados de la religión son indemostrables.
- Conocimiento Científico: La ciencia tampoco ofrece una solución al sentido de la vida; al contrario…
- La Lucha por la Vida.
- Amor.
- Tema de España: La crítica lanzada por Andrés hacia las instituciones, la cultura y las características españolas no hace más que poner de manifiesto la preocupación que por España sintió la Generación del 98. La intrahistoria, reflejada en esa amplia galería de personajes insignificantes y en la idiosincrasia de la vida rural y urbana, son imprescindibles e inseparables de la crítica a España, la causa y objeto de estudio de esa “enfermedad” a la que nos referíamos antes. En la novela se pone de manifiesto el malestar de la época, en concreto, la ideología de la Generación del 98 a la que pertenecía Baroja. Así, hay varias críticas:
Crítica del Escaso Ambiente Cultural
El escaso ambiente cultural que existía en la época y el escaso interés del gobierno para intervenir en ciencia.
Crítica de la Crueldad Humana
La piedad no aparecía en el mundo, pensaba Andrés.
- Los alumnos de la clase de disección maltratan sin piedad a los cadáveres.
- Doña Virginia, abortista, explota y vende mujeres.
- El médico de San Juan de Dios maltrata enfermos.
- Compasión por Dorotea ante el machismo de su marido.
- Desprecio por la fiesta de los toros. El espectador de las corridas tiene una moral cobarde porque exige el valor de otros.
Crítica del Carácter Individualista Español
Impide el asociacionismo y nos hace insolidarios y envidiosos:
- Ruina de Alcolea.
- Competitividad entre médicos.
Crítica de la Represión Sexual
Provocó la aparición de una pornografía sucia y clandestina, de mal gusto; lo contrario de lo que ocurre en Inglaterra, donde la naturalidad del sexo se manifiesta en revistas eróticas de mejor calidad.
Crítica del Patriotismo
Crítica del falso patriotismo que muestran los españoles en su actitud ante el conflicto bélico de Cuba: patriotismo hueco y exaltado al inicio de la guerra, y olvido e indiferencia cuando se pierden las colonias.
Crítica de la Bohemia y del Romanticismo Estériles
No son más que actitudes egocéntricas que dan la espalda a la realidad, inactivas y vacías de compromiso. Quizá el ejemplo más representativo de la obra sea el caso de Villaluz: su vida desgraciada, la incapacidad para criar a sus hijas decentemente, su patético velatorio…
Crítica de los Pobres
Se dejan explotar asumiendo su espíritu de esclavos. A su ignorancia e inconsciencia por procrear proles careciendo de medios: la fecundidad no puede ser un ideal social. No se necesita cantidad, sino calidad, o el perpetuar dolor en el mundo me parece un crimen.
Modos de Presentación de Personajes
Se aprecia una diferencia dependiendo de la importancia de estos. Para los más importantes, Baroja usa una técnica de caracterización paulatina. Se van definiendo poco a poco, en situaciones, por su comportamiento, sus reflexiones, por contraste con otros personajes… Además, son tipos que evolucionan progresivamente.
En cambio, los que crean ambiente son descritos de una vez por todas. Se trata de bocetos vigorosos, de trazos más rápidos cuanto más episódico es el personaje. Baroja utiliza una técnica original para caracterizar a estos personajes, sometiéndolos en sus descripciones a una deformación grotesca. Este gusto por el esperpento y la caricatura obedece sobre todo a una preocupación del 98 por el futuro de España, que alcanzaría su máximo desarrollo con Valle-Inclán. La intensificación deformadora llega hasta los propios nombres que son conocidos por apodos: Las del Moñete, Lagartijo, Las Minglanillas, La Tía Negra…
Formas Expresivas y Narrativas
Hay numerosas descripciones para caracterizar el paisaje y al paisanaje. Prefiere Baroja una pintura progresiva y viva de los personajes principales; en cambio, los secundarios quedan retratados a base de apuntes breves, empleando términos sarcásticos para mostrar su desprecio. Frente a esto, observamos algunas descripciones muy precisas en los detalles, basadas en la observación de la realidad, aunque teñidas de subjetivismo, lo que nos permite hablar de descripciones impresionistas.
En la novela del 98, la voz de los personajes tiene mucha presencia en el grueso de la novela. Para introducir el habla y el pensamiento de los personajes se pueden emplear distintos procedimientos: estilo directo e indirecto, indirecto libre, monólogo, monólogo interior. En El árbol de la ciencia predomina el estilo directo, es decir, mucho diálogo, pero también aparece el estilo indirecto libre. Sin embargo, no hay monólogos ni monólogo interior en toda la obra. Esto se debe a que Baroja no deja un momento a su protagonista solo; en todo momento hay presencia del narrador que acude a las intervenciones. Baroja se muestra como un narrador muy tradicional que no lleva a cabo ningún tipo de innovación estilística. En cuanto al tipo de narrador, se trata de un narrador en tercera persona, omnisciente, porque conoce lo que piensa y siente el protagonista.
El Espacio en El Árbol de la Ciencia
Según su ubicación, los espacios que aparecen en la obra son de dos clases: uno real (Madrid) y otro de base real (Alcolea del Campo no existe en la realidad, pero podría ser cualquier municipio de la provincia de Ciudad Real). En realidad, lo que hace Baroja es contraponer campo a ciudad; al elegir dos espacios tan emblemáticos de los modos de vida de los españoles de principios de siglo, muestra una visión completa de la realidad española.
El mundo rural es un mundo inmóvil, presidido por la pasividad ante las injusticias. Palabras como egoísmo, prejuicios y envidia son las que sobresalen en su pintura. De paso, se denuncia el caciquismo que conlleva la ineptitud y la rapacidad de los políticos.
Según su relación con la realidad: reales (Madrid) y ficticio pero verosímil (Alcolea del Campo). La ciudad de Madrid es un campo de cenizas donde discurre una vida sin vida. De nuevo se nos presentan muestras de la más absoluta miseria, con la que se codea la despreocupación de los pudientes y los señoritos juerguistas.
El Tiempo en El Árbol de la Ciencia
Tiempo Externo
Años anteriores al Desastre del 98 y año posterior.
Tiempo Interno
El tiempo que duran los hechos narrados en la realidad, siguiendo un orden cronológico. Se trata de una narración lineal, que cuenta los hechos desde que Andrés ingresa a la Facultad hasta que se suicida. En la obra se produce una ruptura temporal cuando el protagonista recuerda su infancia (flashback), que consiste en el relato de hechos anteriores a la acción principal que se está contando (Capítulo 4, Parte 1).
Tiempo de la Narración
Lo que ocupan los sucesos seleccionados por el narrador en el orden que les ha dado. Baroja emplea los cinco primeros capítulos de la novela para el primer año de carrera, el sexto para el segundo año, el séptimo para el tercer año, y los capítulos 8, 9, 10 y 11 para el cuarto. En el primer caso se produce una ralentización del tiempo narrativo, mientras que en el segundo y tercero se produce una aceleración. En general, la proporción que ocupa lo estrictamente narrativo en la novela es mínima, dando lugar a un ritmo lento que domina todo el conjunto narrativo.
Estilo Narrativo de Pío Baroja
Es un estilo espontáneo y antirretórico. Hay que mencionar el gusto por el párrafo breve, la naturalidad expresiva, tanto en lo narrativo como descriptivo o el diálogo. Se ha hablado mucho de la dificultad de escribir con sencillez. Sus detractores le critican su pobreza, desaliño e incorrección gramatical. Todo esto es fruto de una prosa abierta y preferencia por la lengua hablada. A veces usa intencionadamente términos coloquiales y vulgarismos con una perfecta conciencia de sus valores ambientales o expresivos.
Filosofía y Pensamiento en El Árbol de la Ciencia
Andrés y el Positivismo
Andrés representa el positivismo, la confianza en que el progreso de la ciencia terminará resolviendo también los problemas más profundos de la vida humana. La unión de la razón y la experiencia son armas suficientes para resolver el problema del mundo exterior y alcanzar la verdad. Con el tiempo, la ciencia no solo nos revelará las leyes matemáticas de la naturaleza, sino también cuál puede ser el mejor orden social posible.
Sin embargo, el problema insoluble del positivismo, presente en toda la obra y heredado de Schopenhauer, es la contradicción entre ciencia y vida. El conocimiento y las ideas son puro reflejo del mundo y antítesis de la vida y, por tanto, de la acción. La ciencia nunca servirá para dar sentido a la vida del hombre u organizar un sistema político perfecto: la ciencia mata la vida.
Iturrioz y el Vitalismo Nietzscheano
Iturrioz opta por el vitalismo en su vertiente nietzscheana: la abolición de los valores judeocristianos traerá consigo el nuevo tipo de hombre que, frente al sinsentido de la vida, no caiga en la desesperación, sino que, al contrario, se arme de valor, serenidad y reposo, que arranque de sí toda la tendencia a la humildad, a la renunciación, tristeza, engaño, etcétera. Guarda parecido con el superhombre de Nietzsche, especialmente su crítica al nihilismo cristiano. Los cambios en España pasaban, para Baroja, por dejar atrás el cristianismo, la mediocridad y el caciquismo.
El final trágico de la novela representa evidentemente un triunfo de Schopenhauer, del veneno nihilista que marca la personalidad de Andrés y también de España (el tema de fondo en los autores de la Generación del 98). La muerte del individuo es también la muerte del universo desde el punto de vista individual. Andrés ve la muerte como algo de consuelo.
Soluciones a los Vacíos Existenciales
Dos posibles soluciones a los vacíos de la existencia:
- Únicamente para sabios. Él consideraba que los seres que eran capaces de dominar los deseos de su voluntad de vivir merecían un trato diferente; eran más inteligentes que los demás al tener la capacidad de anular los sentimientos humanos. Su solución para esto fue vivir solos, lejos de la ciudad y de las personas, para así huir de la tentación, algo similar a los monjes budistas.
- Dedicarse en cuerpo y alma al arte y a la filosofía. Si bien esto no ayudará totalmente a dominar los deseos de la voluntad de vivir, distraerá la mente y aumentará la persecución de conocimiento.
Conceptos Clave en Lingüística y Literatura
Análisis Sintáctico
- Oración simple: personal/impersonal, predicativa/atributiva, activa/pasiva, transitiva/intransitiva.
- Explicación de perífrasis verbales: La forma “…..” subrayada en la línea … es una perífrasis verbal, formada por el auxiliar “…” y el gerundio/participio auxiliado “…”.
- No perífrasis: Las formas “…” subrayadas en la línea …, no constituyen una perífrasis verbal, puesto que son dos acciones verbales diferenciadas. “…” es el núcleo del sintagma verbal predicado y “…” es un complemento verbal … (con el que no puede concordar por ser una forma no personal, por ejemplo, gerundio).
Locuciones Verbales
Tener entendido, echar de menos, echar a perder, echar en cara, dar de lado, darse cuenta, caer en la cuenta, tener en cuenta.
Complementos Circunstanciales
- CC Instrumento: ¿Con qué?
- CC Finalidad: ¿Para qué?
- CC Causa: ¿Por qué?
- CC Beneficio: ¿Para quién?
- CC Compañía: ¿Con quién?
- C. Predicativo: Te veo estupendamente.
Usos del ‘Se’
- Pronombre personal (variante de le/les): Se lo compras por su santo. Cómpraselo.
- Reflexivo.
- Recíproco.
- Causativo.
- Dativo ético.
- Morfema componente del verbo pronominal.
- Marca de pasiva refleja.
- Marca de impersonalidad.
Conceptos Literarios
Rasgos de la Novela de 1902
- Producción en la novela del subjetivismo: ya no basta con reflejar la realidad, sino que interesa el reflejo de la realidad en el individuo y los procesos que desencadenan su conciencia.
- Se abandona el protagonista colectivo y se elige un protagonista individual, centrándose en su retrato interior y su percepción de la realidad externa.
- Una preocupación por renovar el estilo y las técnicas narrativas.
Estilo Literario
- Renovación del lenguaje literario, estilo sobrio y sencillo.
- Presencia constante de subjetivismo.
- Enriquece la lengua con etimologías y expresiones populares.
- Se aprecian impresionismo y expresionismo.
- Innovación en los géneros literarios: la nivola (Unamuno), esperpentos (Valle-Inclán).
Intrahistoria
Concepto que aplica Unamuno a sus novelas, además de a sus ensayos como Del sentimiento trágico de la vida o La agonía del cristianismo, para referirse a la historia común de la gente.
Nívola
Nombre que dio Miguel de Unamuno a las novelas avanzadas en su época. Intenta renovar técnicas narrativas. Ejemplos: La tía Tula, San Manuel Bueno, mártir, Niebla.
Estilo de Azorín
- Uso de oraciones cortas.
- Precisión y claridad.
- Descripción miniaturista, ya que en ellas presta mucha atención a los detalles.
- Uso de palabras olvidadas propias de zonas rurales.
- Obras: La voluntad, Confesiones de un pequeño filósofo.
Esperpento
Deformación grotesca y sistemática de la sociedad española. Obras: Tirano Banderas, El Ruedo Ibérico.
Concha Espina
Continuadora de la estética realista en novela, centrada en protagonistas femeninas y tramas amorosas. Obras: La niña de Luzmela, Altar mayor.
Carmen de Burgos (Colombine)
Escritora andaluza que destaca por su ideario regeneracionista. Sobresale con su colección de cuentos Ellas y ellos o Ellos y ellas. También escribió novelas como Quiero vivir mi vida, y ensayos sobre la mujer y su entorno.
Generación del 14
- Defendían el arte puro.
- Europeísta (frente al casticismo del 98) y cosmopolita.
- Eminentemente intelectual.
- Arte selectivo y minoritario.
- Sólida formación universitaria y marcado talante liberal.
- Novela deshumanizada, alejada del sentimiento.