Principios Activos Biológicos en Cosmética: Impacto y Aplicaciones en la Piel
Aminoácidos y Derivados Proteicos
Se utilizan ampliamente en la cosmética, a menudo combinados con vitaminas de tipo B y C, para retrasar el envejecimiento. Su penetración transepidérmica está comprobada y poseen un gran poder humectante porque son muy higroscópicos. También pueden actuar como filtros solares por su capacidad de absorción de rayos ultravioleta.
Aminos Sulfatados
En su molécula contienen azufre, promueven la normalización de las secreciones y el crecimiento celular en la epidermis, por lo que se utilizan en los cosméticos.
Hidrolizados Proteicos: Colágeno, Elastina y Queratina
Son principios activos muy utilizados y más efectivos que las proteínas, ya que son hidrolizados. Debido a su tamaño molecular, se les atribuye cierta capacidad para estimular el metabolismo cutáneo. Los derivados de colágeno y elastina poseen un gran poder humectante y una actividad tensora, mejorando la apariencia de la piel en las cremas, más allá del uso de las cremas base. Los extractos de queratina se utilizan para corregir el exceso de secreción sebácea por su contenido de cisteína. Otro hidrolizado interesante es el de proteína de seda, porque tiene una gran afinidad por la epidermis, siendo un buen humectante y un excelente suavizante.
Ácido Hialurónico
Poseen propiedades tensoras, hidratantes, suavizantes y lubricantes. El ácido hialurónico es secretado por los fibrocitos a la sustancia fundamental amorfa. Cuanto más ácido hialurónico hay, mayor contenido de agua tiene la dermis. Con el envejecimiento de la piel, se produce una disminución de dicho ácido. Las soluciones aplicadas sobre la piel producen una película elástica e hidratada que absorbe el agua, de manera similar a como lo hace la dermis. Este ácido se obtiene, por ejemplo, de la cresta de gallo.
Enzimas
Poseen cierta actividad queratolítica y tienen la propiedad de suavizar y flexibilizar la piel, por lo que se emplean en exfoliantes y, en concentraciones mayores, en depilaciones progresivas. Las enzimas que actúan sobre la grasa se emplean con eficacia en el acné. La mayoría de los cosméticos denominados “separadores” llevan en su composición enzimas y otros compuestos como Vitamina A, Vitamina F, ácido hialurónico, etc., que estimulan la epidermis, acelerando el proceso de renovación celular y regulando las características de la piel joven, reparando su elasticidad.
Vitaminas
Son esenciales para el funcionamiento del organismo y actúan como catalizadores de muchas reacciones metabólicas junto a las enzimas. El déficit de vitaminas produce alteraciones de la piel. La inclusión de vitaminas en la cosmética está justificada solamente cuando se absorben por la piel. Se utilizan sobre todo las liposolubles y, en menor medida, las hidrosolubles.
Vitamina A
En dosis farmacológicas y en su forma ácida retinoica, es eficaz contra la queratinización excesiva, por lo que se emplea para pieles seborreicas y acneicas. En dosis menores, se usa en pieles ásperas y escamosas. Hay que evitar las dosis elevadas porque es irritante. Es un gran epitelizante e hidratante.
Vitamina F
La mal llamada Vitamina F es una mezcla de ácidos grasos insaturados, concretamente ácido linoleico y araquidónico. Aunque se comercializa con este nombre, el ácido linoleico tiene acción emoliente, incrementa la elasticidad y hay una serie de investigaciones que apoyan un papel estimulante en la renovación epidérmica.
Vitaminas Hidrosolubles: Grupo B
En los cosméticos se utilizan la Vitamina B6 y el ácido pantenóico porque son efectivas en los tratamientos de caspa y prurito, y se les atribuyen acciones antiseborreicas.
Vitamina C
Es el ácido ascórbico. Su penetración transepidérmica está demostrada. Es un antioxidante y tiene acción astringente, por lo que se utiliza como un inhibidor de la función melánica en las hipercromías solares y favorece la cicatrización.
Hormonas
Son sustancias químicas segregadas por las glándulas endocrinas y actúan en pequeñas dosis. En los cosméticos, la inclusión de hormonas sexuales está prohibida debido a los trastornos que pueden ocasionar en los órganos reproductores a determinada concentración. No obstante, la inclusión en pequeñas cantidades justifica ciertos preparados llamados dermocosméticos. Las hormonas son estimulantes de la circulación sanguínea y del metabolismo local, mejoran la seborrea, el hirsutismo ligero y la piel envejecida. Se ha demostrado que los andrógenos son más activos que los estrógenos, y estos más que la progesterona. En los preparados anticelulíticos se emplean extractos de tiroides y de cápsulas suprarrenales que mejoran el metabolismo local.
Extractos Animales
En los cosméticos de tratamiento se utilizan extractos animales, entre los cuales podemos destacar:
- Extracto de Tejido Vivo
- Líquido Amniótico
- Jalea Real
- Otros (ej. baba de caracol, veneno de serpiente)
Extracto de Tejido Vivo
Se utiliza la técnica del señor Filatov, que consistía en colocar tejidos vivos en ambientes desfavorables, haciendo que las células produjeran sustancias denominadas blastoestimulinas. Al inyectar dichos tejidos en órganos vivos, se activan los procesos vitales. Los extractos más utilizados son el extracto de placenta humana o animal, que tiene efectos suavizantes e hiperemiantes, y cuya composición posee una gran cantidad de agentes humectantes. Los extractos embrionarios se obtienen de embriones de pollo y también de fetos de conejo.
Líquido Amniótico
Es aquel en el que flota el feto durante el embarazo, contenido en el interior de la placenta. El que se utiliza es el de los bovinos. Su composición es compleja, ya que es rico en proteínas, aminoácidos, glúcidos y lípidos, por lo que tiene acciones beneficiosas sobre la piel.
Jalea Real
La segregan las glándulas de la abeja reina. En su composición lleva una elevada cantidad de componentes nutritivos, entre los que destacan los aminoácidos, vitaminas y glúcidos. Actúan como reguladores de la hidratación de la piel. Otros ejemplos incluyen la baba de caracol, el veneno de serpiente, etc.
Extractos Vegetales
Las plantas incluyen en su composición fitohormonas, vitaminas, hormonas, aminoácidos, etc. En general, los extractos vegetales son emolientes debido a los aminoácidos, proteínas y aceites, y astringentes en menor o mayor proporción por su contenido en ácidos débiles.
Algunas propiedades y ejemplos:
- Son ricos en Vitamina E y F y en fitohormonas.
- Son rubefacientes: romero, ortiga.
- Son tonificantes: hamamelis, menta.
- Son calmantes: manzanilla.
- Son cicatrizantes: aloe.
- Son antiseborreicos: pepino.
- Actúan como filtros solares: frángula.