Emprendimiento Innovador: Metodologías, Protección y Explotación de la I+D+i
Metodología Lean Startup: Innovación y Emprendimiento Eficiente
El emprendimiento siempre ha estado relacionado con el riesgo. El riesgo puede derivar en fracaso; de hecho, la mayoría de las startups fracasan. Eric Ries nos propone El método Lean Startup: cómo crear empresas de éxito utilizando la innovación continua. El éxito de las startups radica en diseñarlas siguiendo una metodología apropiada, que se pueda aprender y enseñar.
La base de este método radica en crear el producto que el cliente necesita y por el que está dispuesto a pagar, utilizando la cantidad mínima de recursos.
La metodología Lean Startup se centra en un circuito de tres pasos que deben recorrerse en el menor tiempo posible y con la mínima inversión. Se comienza por crear una versión experimental del producto, se mide la respuesta de los clientes y se aprende:
El Circuito Crear-Medir-Aprender
Crear-Construir
Una startup, cuando se lanza, es solo un conjunto de hipótesis y suposiciones que estarán concretadas en nuestro lienzo de modelo de negocio. Lo ideal es crear un producto de prueba (Producto Mínimo Viable, PMV), que es una versión simplificada del producto final.
Medir
En esta fase se mide cómo responden los consumidores al PMV y se toman las decisiones apropiadas.
Aprender
Si el negocio es viable, se debe seguir perseverando o, de lo contrario, pivotar, es decir, reajustar las ideas que no están funcionando.
Pilares de la Metodología Lean Startup
Eric Ries descubrió que existen varias metodologías que pueden contribuir al éxito. Destacan:
Lean Manufacturing
Crear valor para el cliente eliminando todo lo innecesario o superfluo, ofreciendo lo que realmente importa.
Desarrollo de Producto Ágil
Aporta una forma de trabajar ágil y flexible, adaptándose a las necesidades e incorporando mejoras a medida que avanza el proceso.
Desarrollo de Clientes (Customer Development)
Prioriza la perspectiva del cliente en el proceso de emprendimiento, aprendiendo y validándolo a través del contacto continuo con él.
Desarrollo de Producto Ágil: Iteración y Flexibilidad
Los métodos ágiles o adaptativos tienen una visión general del producto o servicio, pero sin identificar el resultado final. Se parte de una hipótesis, que da lugar a un prototipo que se utilizará para explorar el mercado y validar la hipótesis en un continuo proceso de prueba y error. Se van añadiendo funcionalidades al producto, de forma que cada entrega se convierte en una demostración con mejoras.
Estas dos metodologías tienen mucho en común: parten de un problema del cliente, proponen una solución y luego pasan a las pruebas de producto. Estos métodos proponen pruebas sucesivas para aprender de los comentarios de los usuarios antes de comprometer más dinero y recursos. Se acepta el error como parte inherente del proceso de aprendizaje.
Customer Development: El Cliente en el Centro del Emprendimiento
Esta metodología busca crear nuevos productos observando al usuario y permitiendo su participación activa en el proceso de creación. Establece unas hipótesis que deben validarse a través del contacto con los usuarios. Primero se identifican clientes con un problema no resuelto y después hay que validarlos. Con el producto de prueba, comprobaremos si realmente demandarían el producto o si es necesario cambiar.
Una vez validados, hay que conseguir que se conviertan en nuestros clientes y paguen por el producto, lo que nos lleva al mercado de masas. Para generar esa demanda, es crucial definir nuestro mercado objetivo y así centrar nuestras inversiones en marketing.
Cuando ya hayamos generado las primeras ventas masivas, es el momento de convertir nuestra startup en una empresa enfocada en la ejecución del negocio.
Protección de la Innovación: Propiedad Industrial e Intelectual
El fin último de un proyecto de I+D+i es la obtención de resultados que permitan ganar competitividad a través de nuevos productos, servicios o procesos.
Sin embargo, la ventaja competitiva existe siempre y cuando los resultados y el conocimiento relacionado no sean conocidos por los competidores. Es entonces cuando aparecen los aspectos relacionados con la propiedad industrial e intelectual de los resultados derivados de I+D+i y la explotación de dichos resultados.
La propiedad intelectual e industrial están conformadas por un conjunto de normas que regulan la adquisición y el uso de derechos sobre bienes susceptibles de uso comercial.
La propiedad intelectual es el derecho de exclusividad del creador de una obra artística, literaria o científica. A través de su regulación, es posible proteger y defender las creaciones intangibles.
La propiedad industrial hace referencia a derechos que protegen a los creadores de invenciones, permitiéndoles desarrollar su actividad en el mercado frente a competidores, con una protección suficiente frente a terceros.
Esta se materializa en la concesión de derechos exclusivos a sus titulares, otorgando privilegios (monopolio de explotación) pero también unos deberes: el titular puede vender y comercializar su producto con garantías jurídicas frente a terceros, pero entonces la invención pasa a ser de dominio público. Además, el titular deberá pagar tasas de mantenimiento del derecho.
Mecanismos de Protección
Patentes y Modelos de Utilidad
Se concede el derecho de explotación en exclusiva: 20 años en el caso de una patente y 10 en el modelo de utilidad.
Diseños Industriales
Protección de la apariencia o forma externa de un producto. Otorga protección durante 5 años, renovables en períodos de 5 años hasta un máximo de 25 años.
Derechos de Autor (Copyright)
Protección de creaciones fruto de la actividad intelectual.
Estrategias de Explotación de Resultados de I+D+i
Puede realizarse por diversas vías en función de los resultados obtenidos. Se debería considerar la posibilidad de proteger la propiedad industrial mediante alguno de los mecanismos de protección disponibles.
El propietario de un título puede optar por la explotación directa de sus resultados. Si desea trasladar la explotación a una tercera parte, puede recurrir a:
Vías de Explotación
Licencias
Cuando el titular (licenciante) concede los derechos de explotación de la invención a un tercero (licenciatario) a cambio de una contraprestación.
Cesión
Entraña la venta y transferencia de la propiedad de la invención por el cedente al cesionario.
La diferencia principal entre ambas radica en que, con la cesión, se transmite también la titularidad de la invención, mientras que con la licencia se transmite únicamente el derecho de explotación de la propiedad industrial.
La explotación de los resultados puede realizarse a través de la vía comercial, alianzas estratégicas (joint venture) o la creación de nuevas empresas en forma de EIBT (Empresa Innovadora de Base Tecnológica) o de spin-off (empresas que se crean en el seno de otra empresa o entidad con fines tecnológicos).
Otra vía muy importante es la publicación de los resultados en revistas especializadas, la asistencia a congresos y/o ferias nacionales e internacionales, entre otros.
Transferencia de Tecnología: Impulso a la Innovación
Es un proceso por el que se lleva a cabo la transmisión del saber hacer (know-how). Es un factor crítico para el proceso de innovación y la competitividad. Las fuentes de transferencia pueden ser de diversos tipos: universidades, laboratorios, otras empresas. La transferencia tecnológica está presente en situaciones cotidianas de muchas empresas, como la cesión de planos a subcontratistas. Transferir tecnología implica adquirir, ceder o posicionar conocimiento innovador en el mercado. Es necesario someter todo el proceso a acuerdos de confidencialidad para salvaguardar los intereses y derechos de Propiedad Industrial e Intelectual de la empresa.